“Haber triunfado fuera de mi país es algo que debo a mis raíces”

La cantante Ángela Carrasco partió hacia España hace casi 40 años. En este país su talento la condujo aceleradamente al estrellato televisivo y a escenarios de prestigio.

La cantante Ángela Carrasco partió hacia España hace casi 40 años. En este país su talento la condujo aceleradamente al estrellato televisivo y a escenarios de prestigio. La artista, cortésmente y con la dulce sonrisa que suele adornar su rostro, recibió a elCaribe para contarnos sobre su carrera y la nueva etapa de su vida artística, frente la escuela de formación musical ABC Estudio de esta ciudad.
l Gracias por recibirnos en tu escuela ABC Estudio.

l Me siento feliz con la visita de un medio tan prestigioso y familiar como elCaribe a esta casa, que intentamos que sea la casa de los “milagros”. Aquí la gente entra con mucha ilusión y sale, de alguna forma, logrando sus objetivos. Intentamos dirigir los sueños de la gente que aspira a ser artista.

l ¿Eran los mismos sueños que tenías cuando hace muchos años España te acogió como una más de sus hijas? ¿Recuerdas con claridad aquella primera etapa?

l Llegué a España en 1972. En ese entonces, los extranjeros aquí no éramos tantos como ahora. Vine como estudiante gracias a una beca de estudios de decoración y diseño y contando con todo el apoyo de mis padres. No imaginaba que sólo en un año me enamoraría de lo que había visto en libros y de lo que me contaban sobre su país muchos amigos españoles que viven en República Dominicana. Tampoco que tendría la oportunidad de formar mi familia aquí. Pero poco después, mi esposo (el economista Ramón Ignacio Socías Báez) recibió asignaciones diplomáticas, y vinimos a vivir aquí con apenas tres días de casados.

l ¿Tu carrera como artista también comenzó en España?

l Desde muy pequeña, mi inspiración natural y mi mayor anhelo era cantar. Por lo que en mi país comencé a muy temprana edad a presentarme en escenarios y medios televisivos. En poco tiempo, logramos pertenecer a un grupo de artistas importantes que aún perduran en el panorama artístico nacional. Poco después de llegar a España, me presenté en algunos castings para artistas y así inicié mi carrera internacional.

En mi caso, nunca me sentí extraña en España. Un país anfitrión como este siempre espera que los extranjeros entreguen todo su empeño y lo mejor de sí por alcanzar una buena integración.

Reconozco que, de alguna forma, tuve suerte. Mi talento me abrió puertas importantes. Salté del anonimato a ser una cara conocida por todo el mundo en sólo tres años, cuando comencé a trabajar en la televisión estatal, en uno de los dos únicos canales de televisión que había en ese entonces. La gente me veía todos los viernes en el programa “Señoras y señores”, a través del canal Uno. Era un programa totalmente musical. Luego vino mi experiencia en el musical Jesucristo Superstar, una de las mejores referencias que tienen los musicales importantes de este país. Por eso los españoles sienten que soy muy de ellos, aunque sepan que no nací en España. Eso me hace sentir muy feliz y agradecida.

l ¿Cómo asimilaba tu vida ese trayecto vertiginoso de éxitos?

l Aprendí desde temprano que ser artista tiene una connotación especial. La gente te ve de manera diferente porque tú entras a sus vidas, a sus casas, en sus retinas y en sus oídos de una forma distinta a como lo hacen otros profesionales. Por esas bases que establecí en mis inicios y otras muchas grandes experiencias que vinieron luego, España es el lugar en donde logro mis grandes metas. La gente me escucha, me presta atención y me abre puertas.

l Con una vida tan intensa y colmada de actividades, ¿tenías tiempo para extrañar a tu país?

l A mi llegada, pasé mucho tiempo añorando ver el mar entre los edificios. Como isleña era algo que realmente necesitaba. Gracias a Dios, desde hace mucho tiempo tengo la oportunidad de visitar mi país cada vez que así lo siento. Vivo en contacto permanente con mi familia. Los visito y me visitan, por ello, lo que más extraño de mi tierra es su clima caribeño y el calor humano de nuestra gente. Con lo segundo, me ayudan muchos connacionales residentes aquí y otros compañeros del mundo del arte.

Tres de mis primeras alumnas son dominicanas y no dejan de impresionarme. Tienen la miel de nuestro país. La miel del talento y la musicalidad. Forman parte del grupo de nuestros 13 alumnos que presenta obras de teatro musical.

l ¿Cómo ha evolucionado tu carrera artística en los últimos años?

l Ha evolucionado progresivamente en muchos aspectos. Cuando la gente me ve cantar ahora, nota que he seguido creciendo. Aprendo muchísimo en mi escuela. Siempre estoy cuidando mi instrumento, que es mi voz. Trato de lograr registros mejores. No sé si canto mejor que antes. Pero sí sé que ahora lo hago conscientemente, en plena propiedad de lo que hago y sacando lo mejor de mis cuerdas vocales. Estoy en plenas facultades. Aunque debo reconocer que con el tiempo llegaron a mi vida grandes maestros.

l A propósito, ¿cómo sigue tu amistad con el reconocido cantautor español Camilo Sesto?

l Con Camilo nunca he dejado de tener una gran amistad. Seguimos reuniéndonos y no podemos vivir el uno sin el otro [risas]. Cuando duramos algún tiempo sin vernos, nos mantenemos pendientes de nuestras carreras. Él sabe cuándo voy a participar en la televisión, sintoniza el programa, lo mira y me hace comentarios. De alguna forma sigue siendo un tutor importante en mi vida artística. Aunque sabe que ya yo volé hace mucho tiempo. Pero él sigue tutelando mi vida artística y yo se lo permito.

l ¿Cómo les fue recientemente en la gira de despedida de Camilo?

l Fue una gira muy emotiva. Un reencuentro con el público, pero también un reencuentro entre nosotros. El hecho de que no hayamos actuado y cantado juntos durante mucho tiempo, no quiere decir que no sepamos por dónde vamos.

Fue muy emotivo ver y escuchar a públicos de 10 mil, 15 mil y 20 mil personas, gritando nuestros nombres y coreando nuestras canciones. Camilo se ha despedido de los escenarios, pero retirarse dejando atrás la trayectoria que ha tenido, escribiendo, musicalizando e interpretando sus temas, es algo muy difícil. No creo que se vaya a ir del todo. Si eso llegara, una de las cosas que quiero lograr antes, es que llevemos la gira a República Dominicana. Me dio mucha tristeza no haber llevado el espectáculo a mi país. Habría sido maravilloso presentarlo a la gente que nos vio por primera vez en 1978, cuando visité América después de mi éxito en España, iniciando con República Dominicana tras presentar Jesucristo Superstar. Me habría encantado volver.

l ¿Está en tu agenda un posible retorno definitivo a RD?

l No en esta etapa de mi vida. Necesito solidificar muchos proyectos que aún están en su etapa inicial. ABC Estudio es una academia que quiero expandir hacia otros países. De todas formas, me paso largas temporadas en mi país. La gente no se da cuenta porque tengo mucho tiempo sin realizar presentaciones artísticas allá. Por ello, presentar un concierto es algo que nos debemos ambos. Yo al pueblo dominicano y ellos hacerme sentir la felicidad de cantar en casa. El hecho de haber triunfado fuera de mi país se lo debo a mis raíces. Me siento muy feliz de llevar en mi corazón y forma de ser, el ser dominicana. Y tengo muchas ganas de que me vuelvan a ver en el escenario. Es algo que tengo que hacer pronto.

“Fue una bendición que Camilo se fijara en mí”

Junto a Camilo Sesto sigue haciendo planes, concibiendo ideas y analizando presentaciones.

“Hay una gran amistad, hay una gran complicidad entre nosotros porque yo crecí a su lado, y él, de alguna manera, creció al lado mío”, dijo.

Agradeció la deferencia y el desprendimiento de los temas maravillosos que le dio el cantautor español, pero también piensa que Camilo se sintió feliz de encontrar una persona y una voz como la de ella, que transmitiera, como él deseaba, sus canciones.

“No puedo negar que para mí fue una bendición que una persona de la talla y el prestigio de artista y compositor de Camilo Sesto apareciera en mi carrera”.

Como una madre para alumnos de ABC Estudio

A Ángela Carrasco le encanta poder proyectar todo lo que tiene dentro como artista, cantante, actriz y poderlo traspasar a otras personas. “Es lo más bonito que he vivido en mi vida.

La tarea de formar un artista es muy parecida a la misión de ser madre”.

“Cuando asisto a una obra musical en la que se presenta uno de mis alumnos, me pongo más nerviosa que ellos, porque me llena de orgullo saber que la persona que está en el escenario se formó en mi escuela y que le di consejos. Para mí es un logro de su esfuerzo y su talento, pero también de la formación que reciben en ABC Estudio”, expresa la intérprete de “No, no hay nadie más”.

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