BARAHONA.– En estas navidades han surgido en esta ciudad, bandas de delincuentes que se dedican a saquear vehículos de instituciones que transportan raciones alimenticias facilitadas por el Plan Social de la Presidencia para que las distribuyan entre personas pobres, así como a comunitarios que las reciben.
Los integrantes de estas bandas también despojan de canastas y cajas navideñas a las personas que se dirigen a sus hogares, tras ser beneficiadas con las mismas. «Para que hay tantos policías en las calles», se preguntó el ciudadano Luis Vólquez, quien fue despojado de una caja que recibió momento antes.
El primer saqueo contra un furgón del Plan Social se produjo el pasado domingo en Villa Central, momentos después de que el presidente Fernández, se marchara del lugar, luego de distribuir canastas navideñas.
También, una camioneta de una entidad cristiana fue asaltada y saqueada por una multitud, cuando se desplazaba por la Avenida Luperón, de esta ciudad, momentos después de haber salido de las instalaciones de la Quinta Brigada del Ejército Nacional con cajas, que les fueron entregadas por el Plan Social.
En la acción la turba se llevó todas las cajas navideñas. Este saqueo se produjo a pocos metros del edificio que aloja la Dirección Regional Sur de la Policía.
En tanto, que un empleado de la Gobernación Provincial, fue despojado de una caja que llevaba a su casa en un vehículo, por elementos que se desplazaban en una potente motocicleta. Otros ciudadanos han corrido la misma suerte.
«Es la primera vez que suceden en esta ciudad acciones de este tipo, en las navidades», comentó la señora María Mencía Matos, a quien dos individuos trataron de despojar en el mercado público que una caja con productos navideños que había adquirido con su dinero.
La situación ha obligado a los comunitarios a trasladar con mucha discreción a sus viviendas las canastas que les suministra el Plan Social y las que compran en establecimientos comerciales.
Algunas patrullas policiales cuando observan estas acciones se hacen de la vista gorda por el temor de que al enfrentar a los delincuentes, estos las agredan a balazos.
«Si actuamos y matamos a un delincuente, nos va muy mal y si ellos, nos matan, nos jodimos», expresó el integrante de una patrulla policial que pidió no se publicara su nombre.
