En la lista de los millonarios de este dos de julio falta algo. Ese bono gigante que definió esta fecha en cada uno de los últimos cinco años.Siempre la firma principal sobrepasó los tres millones de dólares y este año el pacto más sonoro es el del torpedero Amed Rosario con los Mets de Nueva York por un millón 700 mil dólares.
Ayer, además de comenzar la cacería de talentos de 16 años, entra en vigencia la nueva reglamentación de las Grandes Ligas que pone un tope de 2.9 millones de dólares a cada equipo, para pagos de bonos internacionales.
Las organizaciones que sobrepasen este tope serán multadas con una suma similar al monto sobrepasado y tendrán serías restricciones en su presupuesto de firmas para el próximo año.
Al sistema de Major League Baseball habían entrado unos 15 contratos a las 4:00 de la tarde del lunes, sin que estos sean acuerdos oficiales aún.
Los bonos más grandes que se han otorgado en el país han sido recibidos por peloteros de 16 años.
El mejor contrato del dos de julio de 2011 fue el torpedero Nomar Mazara, quien pactó con los Vigilantes de Texas por la jugosa cifra de cinco millones de dólares.
En la cacería de 2009, el receptor Gary Sánchez y el antesalista Miguel Ángel Sanó recibieron tres millones de los verdes de parte de los Yankees de Nueva York y Mellizos de Minnesota, respectivamente. El lanzador Michael Inoa obtuvo 4.25 millones de dólares al fichar con los Atléticos de Oakland en 2008.
Además de Rosario, otros tres dominicanos recibieron bonos superiores al millón de dólares. El torpedero Amaury Minier firmó con Minnesota por 1.4 millones, Gustavo Cabrera lo hizo con San Francisco por 1.3 y el antesalista Carlos Belén pactó con San Diego por 1.0, según informaron a elCaribe fuentes de los equipos y entrenadores agraciados con un diamante valioso.
Los entrenadores independientes y las familias de los prospectos suelen acordar las comisiones de los primeros y las mismas se ubican entre 25 y 40 por ciento del bono, según el tiempo los recursos invertidos por los llamados buscones.
A partir del próximo año el tope de gastos para cada equipo será marcado por el lugar ocupado en la tabla de posiciones de la temporada de Grandes Ligas para buscar una paridad entre los conjuntos de las grandes ciudades y los llamados mercados pequeños. Entre las fimas logradas este dos de julio se nota cierta paridad ya que Minnesota, San Diego y San Francisco acompañan a los equipos de Nueva York en los negocios millonarios. En 2013, el mejor récord solo podrá gastar 1.7 millones de dólares y el de peor marca contará con 4.7.
