Sin lugar a dudas los feminicidios, la delincuencia y la violencia social, son temas preocupantes. Pero, los suicidios en menores son alarmantes.Según las estadísticas en lo que va de año más de veinte niños, niñas y adolescentes, que se supone tienen sus problemas resueltos, se han quitado la vida en diferentes circunstancias, lo que ha preocupado a las autoridades.
El director del Instituto Nacional de Patología Forense, Santo Jiménez Páez, y la fiscal de la provincia Santo Domingo, Olga Diná Llaverías, señalaron por separado que el pasado año treinta y cinco menores, cuyas edades oscilaban entre los 9 y 18 años, se quitaron la vida.
De dicha cantidad, 23 fueron calificados “como causas indeterminadas” porque las circunstancias o motivos del hecho no fueron establecidas; siete 7 suicidios fueron cometidos por conflicto amoroso; y cinco menores de edad se suicidaron por problemas de depresión.
Mientras que en el 2010, se registraron treinta casos, en 25 de los cuales las autoridades ni los familiares establecieron los motivos; otros cuatro casos se determinó que fueron cometidos por conflictos amorosos o pasionales, y uno por asunto religioso.
“Las cifras son alarmantes. Por que un solo niño que se suicide, hay que verificar qué está pasando, qué lo lleva a tomar este tipo de decisión”, señaló Diná Llaverías.
La mayoría de estos casos, tanto los del 2010 como los del 2012 se registraron en Santiago y la provincia Santo Domingo. Luego le siguen las provincias de San Cristóbal, Espaillat y San Pedro de Macorís.
“Muchos padres desconocían algún intento suicida de estos niños. Otros sabían de las intenciones, pero en otros casos, los menores estaban siendo manejados por profesionales de la conducta por problemas de depresión y otras situaciones”, expresó Jiménez Páez.
Los motivos son múltiples
El director de Patología Forense dijo que diversos factores influyen en el caso de la toma de decisión de quitarse la vida, “porque algunos de estos niños, según el historial, se le corrigió algún mal comportamiento o se le prohibió asistir a algún evento”, manifestó.
Jiménez Páez, indicó que han tenido que enfrentar varios hechos que le han llamado poderosamente la atención, como fue el caso de un niño de 9 años, quien luego de asistir a un culto donde se insistió que después de la muerte se estaría en una mejor vida, regresó a su vivienda, tomó su mochila y se colgó de un árbol.
“El caso es muy particular, porque este niño introdujo su uniforme escolar y otras pertenencias personales en su mochila y se colgó de un árbol, para irse a una mejor vida con el Señor”, refirió Jiménez Páez.
Al mismo tiempo aclaró que no todas las víctimas de suicidios registradas, han tenido la intención de quitarse la vida, sino que han cometido el hecho por experimentar alguna situación.
También destacó que los casos se registran en el seno de familias de todos los extractos sociales, ya sean de niveles alto, medio y bajo. “Todos se ven involucrados de igual manera”.
Dijo que las estadísticas de los suicidios infantiles en la República Dominicana puede ser mayor, pero, muchos de estos casos se quedan en la intimidad de los hogares donde ocurren.
De su lado la magistrada Diná Llaverías, señaló que ahora los padres están en las calles trabajando para el sustento de sus hijos. Salen por la mañana y regresan en la noche y muchas veces en el hogar se desarrollan situaciones que ellos desconocen, y cuando vienen a darse cuenta ya es demasiado tarde.
“La situación de los suicidios es algo que hay que prestarle bastante atención, porque son preocupantes. Para mí, es igual que los feminicidios. Una mujer que maten, es un exceso; un niño que se suicide, es un exceso. No puede pasar”, expresó la magistrada visiblemente preocupada.
Joven se ahorcó porque lo acusaron de ladrón
El caso más reciente de suicidio en menores deedad es el de jugador de beisbol, Alejandro José Silverio, de15 años, ocurrido en Pueblo Nuevo, del Municipio de Quisqueya, en San Pedro de Macorís, quien según familiares se ahorco porque había sido acusado de robarse unas chancletas, y fue exhibido por las calles y el play donde jugaba.“Mi hijo se ahorcó por vergüenza. Toda mi esperanza estaba en ese muchacho, que me decía mami, voy hacer pelotero para sacarte de esta miseria”, expresó, entre sollozos su madre María José, de nacionalidad haitiana.
Alex Boutique, como le decían en su comunidad, cursaba el séptimo grado. Jugaba en la Liga Guzmán, donde sus compañeros lamentan su muerte.
