Faltan tan solo cuatro días para terminar el 2012 y es momento de archivar este expediente, obviamente, no sin entender y reconocer la lógica continuidad de muchos procesos que, a nivel internacional, tuvieron como escena los casi ya agotados 365 días de este año.
Por nuestra parte, hemos estado inmersos en el análisis imparcial de los acontecimientos mundiales a medida que estos hacían su entrada –triunfal o no- en la vorágine de información que rodea a la agitada comunidad internacional, tratando de encontrar respuestas a los fenómenos que le han servido de causa y, tal vez, adelantándonos un poco a las consecuencias que, previsibles o no, siempre han de dar lugar a cambios trascendentales en el espacio y tiempo en el que vivimos.
De esta forma hemos, en este año, seguido de cerca los conflictos en el Medio Oriente, con especial atención a los efectos heredados por la ola de revoluciones y protestas escenificadas en esa parte del globo desde el 2010 hasta este 2012; hemos tratado en diferentes momentos asuntos relacionados al conflicto en Siria que ha dejado hasta la fecha más de 45,000 muertos , así como también del fracaso del plan de paz efectuado allí por la Naciones Unidas; analizamos –también en diferentes artículos – los conflictos que con los vecinos protagoniza Israel y el más reciente, con Palestina y la Franja de Gaza en el que murieron 161 palestinos y 5 israelíes (según la prensa internacional).
Entregamos a ustedes artículos de análisis y opinión en ocasión del asilo diplomático solicitado por Julian Assange a Ecuador y concedido, haciendo uso de sus soberanas prerrogativas, por este país y también, en un análisis escueto y motivados por el inicio de conversaciones de paz entre las FARC y el gobierno colombiano, hicimos una entrega titulada “Las Farc, 50 años de historia”.
El 2012 ha sido un año de una intensa labor diplomática. Se llevó a cabo la Cumbre de las Américas en Colombia, con la ausencia –criticada por muchos y plasmada en uno de nuestros artículos- de Cuba y de su presidente Raúl Castro; se celebró el 42 Periodo de Sesiones Ordinarias de la OEA en Bolivia con mas desavenencias que puntos en acuerdo; el G20 se reunió en México, con noticias buenas para este país anfitrión y con puntos beneficiosos para la campaña presidencial de Obama; el grupo de países No Alineados se reunió en Irán, en donde se entrego la presidencia del mismo, por espacio de un año, al país anfitrión; el Mercosur celebro su cumbre en Brasil con la presencia de Venezuela por primera vez como miembro aunque con la ausencia de Chávez quien continua en Cuba luchando por recuperar su salud, y, se crea el Centro de las Relaciones Árabes, América Latina y el Caribe (CARLAC) de cuyo primer consejo es elegido presidente el Dr. Leonel Fernández.
En Francia gana la presidencia François Hollande, en México, Peña Nieto y en Rusia es electo presidente Vladimir Putin, en relación a estos acontecimientos hicimos entrega de nuestra opinión, como también en relación a las elecciones en Venezuela, en las que se erigió como vencedor Hugo Chávez, y las de Estados Unidos con Barack Obama como presidente reelecto. También en el 2012, el exmilitar Otto Pérez Molina se convierte en presidente de Guatemala. (En relación a este último no hubo opinión).
En resumen, el 2012, que en cuatro días termina, ha sido un año de mucha efervescencia a nivel mundial. El proceso de integración en América Latina, aunque a pasos contados, indiscutiblemente avanza y la política internacional es cada vez más interesante.
China estrena nuevos artefactos de ingeniería moderna (tren bala más largo del mundo y su primer portaviones) y ha elegido a un nuevo secretario general del Partido Comunista quien habrá de convertirse a partir de marzo del 2013 en primer ministro. Japón, con quien ha escenificado disputas a partir de la pretensión china sobre las islas japonesas Senkaku, también ha elegido al conservador Shinzo Abe como primer ministro y las relaciones entre ambos países, sin duda, se tornan muy interesantes a partir de este próximo año y de seguro estaremos escribiendo para ustedes sobre ellas.
En fin, el 2012 ha sido un prolífico año en muchas áreas y también ha sido escenario de lamentables sucesos en otras tantas, sin embargo, esto último no debe ser óbice para agradecer al universo el hecho que continuemos escribiendo y que de ese lado usted me está leyendo. Gracias.
