El hecho de que jueces renuncien por la baja remuneración que reciben no solo representa una pérdida de capital humano sino también económico. En un comunicado, Servio Tulio Castaños, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), dijo que al perder a estos magistrados, el Poder Judicial se enajena de la experiencia de hombres y mujeres que fueron sometidos por más de diez años a entrenamientos y programas de capacitación de muy alto nivel.
Precisó que esta situación debe causar preocupación a todos los sectores sociales, porque implica que al interior de ese poder del Estado se están desarrollando procesos que pueden poner en peligro importantes reformas en curso.
“Si esto no se encara con la energía y voluntad que las circunstancias demandan, se estaría enviando al país la señal de que la reforma de la justicia y el fortalecimiento del Estado de derecho no son una prioridad del Estado dominicano, poniendo en juego el fortalecimiento del Poder Judicial y las demás instituciones implicadas”, indicó.
Consideró que el país no logrará sus metas de eficientizar la administración de justicia y combatir la delincuencia, el crimen organizado y la corrupción si continuamos aprobando un presupuesto cuyo monto no se ajuste a las necesidades que estas tareas reclaman.
“Esta situación debe producir importantes reacciones al interior de las estructuras del Poder Judicial para remediar en lo inmediato el hecho de que esa institución no recibe los recursos necesarios para atender al mejoramiento de los niveles salariales, planes compensatorios y el apoyo económico y los recursos necesarios que les daría a esos magistrados la tranquilidad para dedicarse de manera continua a su misión de impartir justicia”, sostiene.
Asimismo, la jueza de la Tercera Sala de la Corte de Apelación, Ysis Muñiz, entiende que pese a que ser juez es un servicio de vocación, esto no implica que estén llamados hacer un voto de pobreza. A la voz de los jueces se unió el candidato del PLD al Colegio de Abogados, Diego José García. “Se están perdiendo personas capacitadas, con muchos años de experiencia, situación que afecta el sistema. Con sus salarios resulta muy difícil mantener una calidad de vida…”, dijo.
El 77% de los servidores judiciales gana menos del costo promedio de la canasta familiar que se sitúa en más de RD$23 mil.
¿Qué se invierte en la formación de jueces?
El monto del plan presupuestal ajustado para el 2013 para la Escuela Nacional de la Judicatura asciende a la suma de RD$100 millones, de los cuales para el Proyecto de Formación y Capacitación de Jueces se asignó RD$49 millones 254 mil. Para la formación de un aspirante a juez de paz la Escuela invierte un millón 043 mil pesos en cada aspirante, por citar ejemplos.
