Nuevas virtudes de la aspirina

Hace 150 años un ingeniero químico francés formuló el ácido acetil salicílico el cual más tarde, por sus poderes anti inflamatorios, analgésico y antipirético, la casa Bayer de Alemania lo patentizó con el nombre de aspirina.

Hace 150 años un ingeniero químico francés formuló el ácido acetil salicílico el cual más tarde, por sus poderes anti inflamatorios, analgésico y antipirético, la casa Bayer de Alemania lo patentizó con el nombre de aspirina.Esta mágica píldora desde entonces y con el paso del tiempo ha ido sumando virtudes, siendo uno de los más extraordinarios su capacidad de  impedir que las plaquetas se aglutinen e inicien la formación de un coágulo en los vasos sanguíneos de calibre mediano y pequeño. Ese efecto ha beneficiado a millones de seres humanos, disminuyendo sensiblemente los eventos vasculares en órganos vitales como el corazón y el cerebro.

La aspirina no solo es virtuosa en ese campo contra la enfermedad trombótica, sino que, además de ser el medicamento más barato y accesible en la farmacología, se suma dentro de los pocos agentes conocidos con capacidad para disminuir la incidencia de cáncer.

Hace unos días el Instituto Carolinska de Estocolmo (Suecia) publicó en la edición digital del British Journal of Cancer el poder de la aspirina de disminuir el surgimiento y progresión del cáncer en el colon, efecto que también había sido ya demostrado para el cáncer de pulmón.

Este anuncio es muy alentador para la humanidad, ya que con su prescripción se podrá disminuir la alta incidencia y mortalidad de estas enfermedades, las cuales ya representan para muchos una gran  amenaza.

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