Santiago. La crisis en el suministro de agua potable debido a la sequía comienza a sentirse en los barrios de la zona sur de Santiago, donde algunos sectores tienen un mes sin recibir el líquido.Los días de Ana Ramona Pérez empiezan a las 4:00 de la madrugada, momento en que se levanta para aprovechar la única hora en que la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) les hace llegar el agua potable.
“Cuando me levanto pienso que voy a poder almacenar algo de agua, pero al poco tiempo se va”, expresa Pérez, residente en el barrio Los Mártires del sector Pekín.
Mientras que sus vecinos enfrentan una crisis peor, pues desde marzo los grifos del baño y la cocina no han visto destilar una sola gota del líquido.
En estas barriadas es común ver a familias enteras cargando agua en botellones desde las llaves de la parte alta.
Antonio Mercado, morador del barrio Cristo Rey, dice que muchas veces tiene que dejar de bañarse, porque las pocas veces que pueden comprar agua en botellones la utilizan para cocinar los alimentos.
Molestias
“Cada día el servicio es más precario y aquí no tenemos para poder comprar los camioncitos con agua”, apunta Mercado al hablar con reporteros de elCaribe. Mediante un comunicado, la Coraasan refiere que al iniciarse la Cuaresma, los ríos de los cuales se alimentan los acueductos de Nibaje y la Noriega disminuyen sus caudales, originando un déficit mayor entre la demanda de agua y la producción. En la actualidad, la empresa acuífera opera los acueductos de Santiago, Licey, Tamboril, Puñal, Villa González y San José de las Matas, sectores afectados por la sequía.
Embalses Tavera y Bao comienzan a disminuir
La Coraasan recuerda que los embalses Tavera y Bao se alimentan de los ríos Yaque del Norte y el Bao que va perdiendo su caudal. “Si no se presentan lluvias en los meses de abril y mayo, el déficit en la captación se incrementa al iniciarse el período de verano, lo que obliga a Coraasan a implementar programas más fuertes de racionalización ”, puntualiza.
