Chicago. El dominicano Sammy Sosa fue el gran ausente en la celebración ayer del aniversario 100 del Wrigley Field y un ejecutivo del conjunto dijo que Sosa tiene unas cuantas cosas pendientes por arreglar antes de ser recibido de vuelta por la organización.“Hay unas cuantas cosas que Sammy necesita ver y considerar antes de tener cualquier vínculo con el equipo”, dijo el vocero de los Cachorros, Julian Green. Fuentes señalaron que algo que Sosa debe hacer es limar asperezas con varios excompañeros por sus acciones en los últimos años de su carrera con los Cachorros.
Sosa disparó 293 de sus 609 cuadrangulares en el Wrigley Field durante 13 años, desde 1992 hasta 2004, y registró tres campañas de 60 o más jonrones, incluida la de 1998, cuando junto a Mark McGwire eclipsaron la entonces marca de 61 tetrabases en una contienda.
Pero dejó el equipo en malos términos tras no jugar en el último juego de la estación de 2004. Se fue del estadio antes de que terminara el partido. En el invierno de ese año fue mandado a los Orioles de Baltimore.
Una historia del New York Times reportó que Sosa estaba en una lista de peloteros que en 2003 dieron positivo a esteroides. Los Cachorros esperan arreglar la situación con Sammy antes de que festejen el aniversario número 100 de la mudanza del club al Wrigley Field, que sucedió en 1916.
Sosa, el líder en cuadrangular de los Cachorros de todos los tiempos con 545, fue el gran ausente en un día en el que los Cachorros tuvieron de vuelta a exjugadores como Ernie Banks, Billy Williams, Ferguson Jenkins, Lee Smith, Bob Dernier, Gary Mathews y Ryan Dempster para festejar la historia del vetusto Wrigley Field.
