El director Ejecutivo de la Mancomunidad del Gran Santo Domingo, Onofre Rojas, afirmó ayer que la República Dominicana carece de una política adecuada en materia de agua potable y saneamiento. Dijo que resulta paradójico que mientras el país exhibe elementos de desarrollo del primer mundo, en términos de infraestructura vial y de transporte, como el Metro, la inversión en aspectos fundamentales para la calidad de vida de la población, como son el suministro de agua potable y la conservación de sus fuentes, es mínima.
Consideró que el tema debe ser declarado de prioridad nacional por parte del Gobierno, debido al gran impacto que ejerce sobre la salud pública y la productividad del país.
Puso como ejemplo, el virus de la chikungunya que azota actualmente a la población, el cual atribuyó a deficiencias en el saneamiento básico. “Esa enfermedad está paralizando y afectando a muchas empresas, y la economía del país se está afectando muy fuertemente, pero además, todo lo que significan estas enfermedades para lo que se ha definido como la palanca de la economía nacional, que es el turismo”.
Exhortó al presidente Danilo Medina a destinar una mayor partida presupuestaria a este sector, al tiempo que criticó que el tema haya sido excluido de entre las prioridades de financiamiento con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En ese sentido, añadió que el país está perdiendo la oportunidad de obtener financiamientos muy buenos para resolver problemas serios y puntuales como son el suministro de agua y los desechos sólidos.
Citó el caso del Gobierno japonés, que ha ofrecido financiamientos a 40 años, con 10 años de gracia, y a una tasa anual de 0.5%.
Conuquismo afecta cuencas
En otro orden, Rojas lamentó las condiciones en que se encuentra la cuenca alta del río Ozama, la cual dijo se asemeja a un arroyuelo por culpa del conuquismo. “Eso implica que Medio Ambiente tenga que reforzar los planes de vigilancia, pero además, los planes de integración de la población, porque esa gente es pobre y necesita ser incorporada a la economía. Hay que buscarle alternativas de incorporación a proyectos de desarrollo”.
Onofre Rojas, también insistió en la necesidad de actualizar el marco legal regulatorio del sistema y la revisión de las instituciones rectoras a través de la aprobación de la ley de aguas, la cual lleva más de diez años en el Congreso Nacional.
Dijo que cuando estuvo al frente de la Comisión de Reforma y Modernización del Estado, se elaboró un diagnóstico del cual surgió el Ministerio de Medio Ambiente.
Considera que es un buen momento para hacer una revisión de sus prioridades y que el Gobierno dote a la institución de mayores recursos para hacer frente a la problemática.
Se requieren medidas inmediatas
El urbanista, Erick Dorrejo, también coincide en que el tema de la oferta y demanda de agua para consumo humano debe ser una prioridad para el Gobierno.
Dijo que para ello se requiere de medidas inmediatas, como son el control de las pérdidas en las redes de distribución, el mejoramiento de las redes intradomiciliarias, la educación de la población y el saneamiento y reforestación de las cuencas. “Al igual que medidas a mediano y largo plazo, como la definición de una política de uso y ocupación del suelo a nivel nacional (para las políticas nacionales), como a nivel local (para la definición del uso del territorio a nivel urbano y rural)”.
El experto sostiene que la política estatal en el suministro del líquido debe ser abordada desde dos escalas: la regional que permita aglutinar en una sola institución a los entes encargados del suministro de agua, cuya operación debe planificarse en función de las fuentes disponibles y vinculadas a los asentamientos humanos próximos a las mismas.
En cuanto a la escala local, y en el caso específico del Gran Santo Domingo, administrado por la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), afirma que la situación amerita un plan especial debido a las características de este territorio, donde vive el 36% de la población nacional.
Afirma que a pesar de que la cobertura señalada por la entidad gubernamental sobrepasa el 95%, en la realidad no existe sistema de agua intra-domiciliario, dejando una gran parte de la población sin cobertura. “En ese sentido se requiere dotar de un sistema que proporcione agua a cada vivienda, lo cual contribuirá a disminuir las pérdidas que se generan en la ciudad”.
Urge definir políticas de uso de suelo
Para Dorrejo, tanto el tema de la contaminación de las cuencas como la oferta y demanda de agua son el resultado de la falta de una política de uso y ocupación del suelo. “Mientras no se defina el uso de los territorios y las actividades que se deben desarrollar en los territorios, seguiremos observando conflictos por la ocupación, mal uso o uso indiscriminado del territorio”, dijo.
Para ello insiste en la necesidad de concertar entre los diversos sectores de poder para acordar una política de uso del suelo, expresada a través de un Plan Nacional de Ordenamiento Territorial.
Lamentó que aunque el tema del alcantarillado es fundamental, ningún gobierno lo ha asumido. “Necesitamos un gobierno que asuma el alcantarillado como su obra cumbre, la priorice y la ejecute. Quizás no en cuatro año, pero sí a largo plazo avanzar en su construcción”.
Sólo el 27% del Gran SD tiene alcantarillado
El Plan Maestro del Alcantarillado Sanitario del Gran Santo Domingo, elaborado por la CAASD, revela que apenas el 27% del Distrito Nacional y de la zona urbana de la provincia Santo Domingo está servida con redes de alcantarillado sanitario. Onofre Rojas sostiene que aunque el plan contempla la ejecución de acciones para que en el año 2040 la cobertura haya aumentado a un 73%, podrían acelerarse esos procesos para resolver el problema. Dijo que igual de preocupante es que el país no haya podido encarar el tema de los residuos sólidos. “Es una vergüenza que República Dominicana no pueda presentar un modelo de relleno sanitario funcional, mientras que un país como Nicaragua, tiene tres modelos en funcionamiento.
LOS EXPERTOS
Onofre Rojas
Dir. Mancomunidad del Gran Sto. Dgo.
Considera que el Gobierno tiene que invertir más recursos para garantizar la conservación de las cuencas y el manejo del sistema de suministro y distribución del líquido. Deploró que países más pobres que República Dominicana tengan mejores indicadores de salud, por desarrollar políticas efectivas en esa dirección.
Erick Dorrejo
Urbanista
Opina que se requiere la implementación de medidas inmediatas, como son el control de las pérdidas en las redes de distribución, el mejoramiento de redes intradomiciliarias, la educación de la población y el saneamiento y recuperación de las principales cuencas hidrográficas del país.
