El mexicano Saúl -Canelo- Álvarez, en un combate que se tornó aburrido durante algunos asaltos, derrotó por decisión dividida al cubano Erislandy Lara.
La pelea, en la que no hubo título mundial en disputa, se pactó a 12 rounds y fue montada en la arena del lujoso hotel MGM de la ciudad de Las Vegas, Nevada, Estados Unidos organizada por la compañía Golden Boy Promotions. La riña terminó a la 1:08 minutos de la madrugada del domingo.
El combate, transmitido para América Latina y el área del Caribe por la cadena SPACE, de Argentina, tuvo sus momentos ardientes, pero gracias al ataque (constante) de Canelo Álvarez.
Lara, de guardia zurda, se mostró tímido, huidizo, danzando durante todo el trayecto de la reyerta y en ocasiones conectando algunos puños que llegaron limpios a la cara del mexicano.
Parecía que el peleador cubano, que vio desmejorar su foja profesional en 19-2 con 12 triunfos por nocaut, no quería caer por nocaut, como habían vaticinado analistas quienes también dijeron que el mexicano sería el ganador por cualquier vía.
Se mantuvo corriendo, alejado de la recia ofensiva del pugilista azteca que con su victoria mejora su expediente ahora con 44-1-1 y 31 nocauts.
Los tres jueces dieron las siguientes votaciones: 115-113 (para Lara); 115-113 (a favor de Canelo Álvarez) y 117-111, igualmente por Álvarez. La tarjeta de elCaribe marcó 116-112 para Canelo Álvarez.
En la primera mitad de la pelea el pleito se mantuvo parejo, aunque con una ligera ventaja para Canelo Álvarez que nunca disminuyó su ofensiva.
Lara, en los rounds sexto, séptimo y octavo, trató de conectar sus golpes, especialmente con la mano zurda en recto y gancho, en algunos momentos logró llegar al cuerpo de Canelo Álvarez, pero sin potencia.
En cambio Canelo Álvarez, con su ataque contante, cortaba el ring, tomaba el comando de las acciones. Con fuertes combinaciones a los planos bajos, dobló el cuerpo de Lara quien sufrió una serie cortadura en su ojo derecho.
Pero también Canelo Álvarez, tras recibir una efectiva combinación (de jab y recto corto a la cara), fue herido en el pómulo derecho.
No obstante, el bravo boxeador mexicano nunca dio muestra de bajar la guardia. Asimismo, su condición física fue excelente. Se notó con buenos pulmones. Su respiración fue también bastante positiva lo que le permitió -en todo el trayecto de la pelea- no acusar cansancio.
