LA HABANA— La Sección de Intereses de Cuba en Estados Unidos extendió hasta diciembre la atención consular limitada y mediante agencias de viaje, luego de que continuó sin conseguir un banco con el cual poder operar debido a las sanciones impuestas por Washington a la isla.
«A pesar de los esfuerzos realizados, aún no ha sido posible encontrar un banco norteamericano o extranjero radicado en los Estados Unidos o en un tercer país, que asuma nuestras operaciones bancarias», expresó el martes un comunicado entregado a medios de prensa extranjeros en esta capital.
Como «solución temporal» la sede extenderá sus servicios consulares de renovación de pasaportes y prórrogas de los mismos a los ciudadanos cubanos residentes en Estados Unidos hasta el 31 de diciembre mediante «agencias de viaje que tienen vínculos de trabajo» con la sede diplomática isleña, dijo el comunicado.
«La Sección de Intereses reitera que las solicitudes motivadas por razones humanitarias continuarán recibiendo un tratamiento expedito y que, de acuerdo con las normas migratorias vigentes en Cuba, los ciudadanos cubanos residentes en el exterior deben portar un pasaporte válido para ingresar al territorio nacional», agregó.
Cuba otorga pasaportes válidos por seis años, pero requiere que sus ciudadanos obtengan una prórroga cada dos.
Los problemas en la atención consular comenzaron cuando en febrero pasado, luego de que el Banco M&T le informó a la sede diplomática a mediados de 2013 que no podría seguir trabajando con esa representación cubana debido a las leyes estadounidenses que les prohíben comerciar con la nación caribeña.
En mayo dada la demanda por parte de cubanos residentes en Estados Unidos de pasaportes y prórrogas, las autoridades informaron que de manera temporal se realizarían solo estos servicios a través de algunas agencias de viaje.
Se estima que 1,8 millones de personas de origen cubano residen en el extranjero, la inmensa mayoría de ellos en Estados Unidos que protege a los isleños con normativas especiales vigentes desde la década de los 60 –la Ley de Ajuste Cubano que les da tratamiento y facilidades de refugiados–.
Según la consultoría con sede en La Florida The Havana Consulting Group en 2013 unos 490.000 residentes en Estados Unidos vinieron a Cuba para visitar a familiares.
Ambos países tienen sus nexos diplomáticos rotos desde la década de los 60, cuando tras el triunfo de la revolución cubana, Washington impuso severas sanciones buscando presionar cambios en el sistema político de la isla.
Por su parte, en febrero el Departamento de Estado de Estados Unidos también indicó que hacía esfuerzos para encontrar una solución al problema de los servicios consulares cubanos en su territorio, pero hasta la fecha no se produjeron novedades.
