¡Cuidado con el cansancio!

Muchas veces nos sentimos, nos vemos cansados, y en verdad lo estamos. El cansancio puede ser físico, mental o emocional.

Muchas veces nos sentimos, nos vemos cansados, y en verdad lo estamos. El cansancio puede ser físico, mental o emocional. El cansancio físico, puede ser ocasionado por una carga laboral muy fuerte. El obrero que trabaja construcción, en un taxi, en un autobús del transporte público, la mujer que pasa más de 14 horas de pie, en su salón de belleza; el dependiente del colmado que atiende su negocio durante más de 15 horas cada día. Esas personas, al final de la jornada están cansadas. Su cuerpo apenas responde a las órdenes de su cerebro. Están extenuados. Solo anhelan llegar a casa, tomar un baño e irse a la cama a descansar.

Pero no solo el esfuerzo físico es el que genera cansancio, también, aquel que realiza un intenso trabajo intelectual, aunque se la pase sentado en una silla, al final de su labor terminará terriblemente cansado; lo mismo que el estudiante que pasa horas interminables frente al computador, sumergido entre libros y cuadernos. Estos, experimentan el cansancio mental, que casi siempre se traduce al cansancio físico y viceversa.

De los tres, sin embargo, el más peligroso es el cansancio emocional asociado al denominado “Síndrome del Cansancio Emocional o Síndrome del Agotamiento Profesional”, que es definido como una dolencia común a los que se desempeñan en el campo de la “intervención social” como médico, asistente social o trabajo policial.

“Este agotamiento se trata de un “síndrome de cansancio emocional, despersonalización y reducción de la motivación de logro personal”.

Quien padece de este síndrome se siente que ha agotado todos sus recursos emocionales y no le queda nada más para los demás. Es probable que desarrolle actitudes negativas y que se insensibilice ante los problemas, hacia las personas que requieren su ayuda, así como que aparezcan sentimientos de culpa por no ser capaz de solventar todos sus problemas.

El apoyo de otra gente, especialmente colegas, ayuda a la persona a mantener alguna perspectiva de su trabajo y de ella misma.

Este tipo de agotamiento es una respuesta al estrés crónico, más que al agudo. Es bueno estar atentos si aparecen estos síntomas.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas