LONDRES (AP) — La Organización Mundial de la Salud estropeó los esfuerzos para detener los contagios de ébola en África occidental, reveló el viernes un informe interno, al tiempo que el presidente estadounidense Barack Obama nombró a un asesor político de confianza para que asuma el control de la frenética respuesta de su país a la epidemia.
El incremento en el escrutinio a la respuesta internacional se produjo en momentos en que autoridades estadounidenses se apresuraban a cortar posibles rutas de infección de tres casos registrados en Texas, comunicándose con un buque crucero en el Caribe y múltiples vuelos dentro del país. Los legisladores republicanos y el gobierno de Obama debatían la posibilidad de restringir el ingreso de viajeros provenientes de países donde comenzó el brote, sin que se llegara a una resolución.
Pero mientras el secretario de Estado John Kerry renovaba las súplicas para que haya una «respuesta colectiva, global» a una enfermedad que ya ha provocado la muerte de más de 4.500 personas en África, el borrador del informe de la OMS hacía notar errores graves dentro de una agencia a la que se ha asignado ser el líder de la comunidad internacional en la coordinación de respuestas a brotes de enfermedades.
El documento —una cronología del brote— halló que la OMS, una agencia de las Naciones Unidas, desperdició oportunidades para evitar que el ébola se extendiera poco después de que fue diagnosticado por primera vez en Liberia, Sierra Leona y Guinea a principios de este año, culpando de ello a factores que incluyen personal incompetente y falta de información. Sus propios expertos no lograron captar que los métodos tradicionales para contener enfermedades infecciosas no funcionarían en una región con fronteras porosas y sistemas de salud ineficientes, halló el informe.
«Casi todo el mundo involucrado en la respuesta al brote no logró captar la probabilidad bastante clara de que ocurriera algo muy negativo», indicó la OMS en el informe, el cual fue obtenido por The Associated Press. «Se estaba preparando una tormenta perfecta, lista para salir a la luz con toda su fuerza».
La propia burocracia de la agencia fue parte del problema, halló el informe. Hizo notar que sus directores en sus oficinas en países de África son «nombramientos motivados políticamente», efectuados por el director regional de la OMS para África, el doctor Luis Sambo, que no depende de la directora de la agencia en Ginebra, la doctora Margaret Chan.
El doctor Peter Piot, codescubridor del virus del ébola, estuvo de acuerdo en que la OMS actuó con demasiada lentitud.
«La oficina regional en África es el primer frente», dijo Piot, entrevistado en su oficina en Londres. «Y no hicieron nada. Esa oficina realmente no es competente».
La OMS declinó comentar en torno al documento, que no fue emitido públicamente, y dijo que Chan no estaría disponible para ser entrevistada por la AP. Ella sí le dijo a Bloomberg News que «no fue informada completamente sobre la evolución del brote. Respondimos, pero nuestra respuesta podría no haber estado a la altura de la escala y complejidad» de éste.
Mientras tanto, Obama se movilizó para fortalecer la respuesta de Estados Unidos a la enfermedad y nombró a Ron Klain, ex jefe de personal del vicepresidente Joe Biden, como el coordinador del gobierno contra el ébola.
Klain ha fungido como operador demócrata largo tiempo, y también se desempeñó como alto asesor del vicepresidente Al Gore. Carece de experiencia médica y nunca ha estado en un puesto de salud pública. Pero la Casa Blanca dijo que se desempeñará como «coordinador de la respuesta al ébola», en una insinuación de que su papel principal será sincronizar las acciones de muchas agencias gubernamentales en el combate al virus.
«Esto es mucho más amplio que una respuesta médica», dijo Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca, refiriéndose a la experiencia de Klain en el sector privado y en el público, y a sus relaciones con el Congreso.
«Todo eso significa que es la persona adecuada para el trabajo, y la persona adecuada para asegurarnos de que estamos integrando la respuesta entre las diversas agencias a este desafío significativo», agregó.
Los legisladores republicanos siguieron presionando al gobierno el viernes para que sopese restringir los viajes a Estados Unidos desde los tres países del oeste de África afectados por el ébola. Pero a pesar de la afirmación de Obama el jueves de que no se «opone filosóficamente» a una prohibición así, Earnest reafirmó la resistencia de la Casa Blanca a aplicar una medida de ese tipo.
El republicano Mike Leavitt, ex secretario de Salud en el gobierno del presidente George W. Bush, dijo el viernes que ve «muchos problemas» con una prohibición así. Aunque podría parecer una buena idea, funcionarios del gobierno de Bush que la evaluaron para contener la gripe aviar llegaron a la conclusión de que no funcionaría, al tiempo que generaba muchas preguntas difíciles, como por ejemplo: ¿a quién se le permitiría viajar y a quien no?
Las autoridades estadounidenses continuaron sus esfuerzos para contener las consecuencias del primer caso reportado de ébola en la nación, el de Thomas Eric Duncan, un viajero liberiano que murió la semana pasada en un hospital de Dallas.
Funcionarios indicaron que trabajaban para retirar a una trabajadora de hospital —que había manejado un espécimen de ébola en un laboratorio— de un crucero en el Caribe, aunque ella ya llevaba 19 días sin mostrar signos de estar infectada. El buque de la línea Carnival se dirigía de vuelta a su puerto en Galveston, Texas, el viernes tras no recibir autorización para echar anclas en Cozumel, México, y las autoridades en Belice no permitieron que la mujer bajara del barco.
