El 28 de este mes vence el plazo de los 90 días concedidos a los hijos de extranjeros nacidos en el país antes de abril de 2007 para optar por la naturalización, en atención a lo previsto en el artículo 12 de la Ley 169-14.
El plazo vence, mientras apenas 1% (según la ONU) de quienes se beneficiarían de esa ley ha acudido a las dependencias del Ministerio de Interior y Policía.
El ministro José Ramón Fadul ha deplorado la baja concurrencia (883) y entiende que se creó una expectativa muy por encima de la realidad. Se esperaban entre 60 y 70 mil personas, sobre todo de origen haitiano.
Fadul ha declarado que estudia la posibilidad de prorrogar el plazo. El pasado miércoles, el gobierno haitiano, a través de su canciller, Pierre Duly Brutus, solicitó la extensión del período.
Precisamente, una de las causas del bajo registro es que el gobierno haitiano no ha dado el soporte adecuado a sus ciudadanos para obtener documentos clave.
Además, la falta de información y la marginalidad en que viven la mayoría de esas familias constituyen factores que les dificultan el acceso al plan.
Dado el empeño que han verbalizado instituciones internacionales en favor de la documentación de esos ciudadanos, se entendía que acudirían presurosas para propiciar recursos para el programa. Lo mismo se esperaba de algunas organizaciones nacionales y del Gobierno haitiano.
Las autoridades nacionales han desplegado un extraordinario esfuerzo para crear los soportes para el avance del plan. La respuesta está a la vista.
Pero la realidad es que a la inmensa mayoría de esos ciudadanos poco les importa lo que se les ofrece. Es una resistencia al registro muy vinculada a una cultura del “ocultamiento” y la marginalidad.
Es plausible la actitud del ministro de Interior y Policía de estudiar la concesión de un nuevo plazo. Generosamente, la República Dominicana debe seguir abierta a propiciar que esas personas sean documentadas para que se beneficien del plan y puedan disfrutar de los derechos que les asisten como seres humanos.
El plazo para registrar a quienes nacieron en el país antes de abril de 2007 debe ser prorrogado.
