El presidente Danilo Medina entregó ayer diez centros educativos en cinco provincias del Sur del país, construidos con una inversión global de 323 millones 284 mil 347 pesos.
En la presente semana, el presidente Medina ha entregado 353 nuevas aulas para su incorporación a la Tanda Extendida.
El Ministro de Educación, Carlos Amarante Baret, pronunció los discursos centrales de los actos de inauguración efectuados en la escuela básica Ernestina González de Neiba, y Básica Max Henríquez Ureña, en San Cristóbal. Proclamó que con la implementación de la Jornada Escolar Extendida, los niños, niñas y jóvenes están viviendo la Edad de Oro de la educación dominicana.
El funcionario se apoyó en el libro “La Edad de Oro”, de José Martí, una recopilación de cuatro revistas publicadas en 1889, con cuya publicación el apóstol cubano se proponía incitar en los niños la búsqueda del conocimiento, del amor y la justicia. “Los niños saben más de lo que parece, y si les dijeran que escribiesen lo que saben, muy buenas cosas que escribirían”, dijo citando a Martí.
Expresó que está con la Revolución Educativa que impulsa el presidente Medina, la escuela dominicana y los niños, niñas y jóvenes dominicanos están viviendo “la Edad de Oro”, ya que con este mecanismo reciben una educación integral, y que además de desayuno, almuerzo y merienda, desarrollan actividades extracurriculares como arte, danza, pintura, canto y otras disciplinas que los prepararán para un futuro mejor. “Así queremos que los niños de América sean: hombres que digan lo que piensan, y lo digan bien: hombres elocuentes y sinceros”, expresó, citando nuevamente a Martí.
Lo citó nuevamente cuando dice en La Edad de Oro, que “las niñas deben saber lo mismo que los niños, para poder hablar con ellos como amigos cuando vayan creciendo”. Y dijo, junto al libertador de Cuba que “lo que queremos es que los niños sean felices”.
“Y para que los niños sean felices” –apuntó- “se necesitaba una revolución educativa como la que está impulsando nuestro presidente Danilo Medina, pero él no puede hacerlo todo solo, para que esa revolución educativa tenga sus efectos y forme a nuestros ciudadanos en una educación sólida, se requiere que los padres, las madres y amigos de la escuela se enteren de qué está ocurriendo a lo interno de los planteles, que se involucren en la calidad de la educación que reciben sus hijos, que se mantengan atentos qué está ocurriendo a lo interno de la escuela”.
A juicio de Amarante Baret, se necesita que los padres y las madres formen parte de la escuela y participen activamente en la educación de sus hijos.
Las nuevas escuelas, edificadas con fondos del Ministerio de Educación a través del Ministerio de Obras Públicas son, en Bahoruco, municipio Neiba, la Ernestina González y Profesora Paulina Méndez Herasme, y en Tamayo el centro Anacaona. En San Cristóbal la escuela Doctor Max Henríquez Ureña, en Bajos de Haina; Los Algarrobos, en el municipio cabecera San Cristóbal, y Danilo Ginebra, en Villa Altagracia.
En la provincia San Juan, la escuela Las Mulas, en Las Matas de Farfán; en Barahona, la escuela Paraíso, en el municipio del mismo nombre; y en Pedernales, el liceo técnico Luis Medrano González y la escuela Tres Charcos, en Oviedo.
