A ese ritmo, pronto no serán las “Reinas del Caribe”, sino las “Reinas de Centroamérica”.Y es que durante los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz 2014 eso quedó confirmado de una estruendosa manera en la madrugada de ayer. La selección dominicana de voleibol femenino se llevó la cuarta medalla de oro seguida en estos juegos, confirmando el maravilloso momento por el que atraviesan.
La de Veracruz 2014 se une a las preseas logradas en Mayagüez 2010, Cartagena 2006 y San Salvador 2002.
Ha sido un año fuera de serie para las dominicanas que son dirigidas por el brasileño Marcos Kwiek. “Fue un año de mucho trabajo”, dijo el técnico desde Veracruz. “Cumplimos nuestros objetivos con éxito y seguro que podemos lograr más”.
Kwiek está convencido de eso, pero igual sostiene que para llegar así hace falta trabajar para mejorar algunos aspectos del juego. Sin embargo, Veracruz 2014 no es un buen ejemplo para encontrar debilidades dentro de la escuadra que es capitaneada por Bethania de la Cruz. La tropa tricolor se llevó el oro sin perder un solo set, y entre sus víctimas estuvo Venezuela (25-6, 25-15 y 25-16), Colombia (25-22,25- 21 y 25-17), Cuba (25-20, 25-19 y 25-19), México en seminales (25-11, 25-23 y 27-25) y Puerto Rico en la final (25-19, 25-19, 25-19). “Eso no era el plan, nunca nos planteamos no perder un set”, admitió Kwiek. “La meta siempre fue ganar el oro como sea”, agregó.
Eso deja claro que en el área centroamericana existe poco para contrarrestar la recia ofensiva de las dominicanas. Sin embargo, el mote o calificativo de “Reinas del Caribe” le sigue gustando a la mayoría de las integrantes del equipo nacional de mayores, aunque el cambio a “Reinas de Centroamérica” no les molestaría, a juzgar por las opiniones de Priscila Rivera y Bethania de la Cruz.
“Ese título de Reinas del Caribe nos lo puso la gente, nuestros fanáticos”, apunta Rivera, quien se hizo de su tercer oro centroamericano. “Al final, el público es el que tiene la potestad de llamarnos como más les guste, siempre y cuando sea desde el respeto”, agregó.
Rivera baraja la posibilidad de retirarse tras los Juegos Olímpicos de 2016.
Así, de esta feliz manera, el combinado quisqueyano cierra un 2014 histórico con el oro centroamericano, el metal dorado de la Copa Panamericana de México y el quinto lugar en el Campeonato Mundial de Italia como los logros de mayor connotación.
Eso fue lo que se cocinó arriba, pero abajo, en las categorías menores, hubo resultados impresionantes que hacen pensar que el dominio de las dominicanas será para rato. En Costa Rica, la selección femenina Sub-18 resultó campeona del torneo Norceca, la primera medalla dorada en esa categoría, y clasificó al Mundial de 2015. República Dominicana, además, conquistó su segundo título consecutivo en la Copa Panamericana Sub 23 que se llevó a cabo en la ciudad de Ica, Perú.
