Uno de los lectores que me evidencia sigue esta columna, Julio González, me escribe vía email a propósito de varios de mis comentarios de los últimos días sobre la situación interna del PRD, sobre los que parece que tiene puntos de vista diferentes. Lean ahí: “Quiero hacer provecho de la ocasión para desearle unas muy felices pascuas y un mejor y próspero Año Nuevo 2014, y a la vez hacerle unas tontas preguntas: 1) ¿Por qué una “reunión” de la ¿Comisión Política? en la penumbra de un salón de una fonda en la Ciudad Ganadera y no aprovechar el recién inaugurado Salón, del que le anexo foto, de la Casa Nacional?, y 2 ¿No eran merecedores de este confort los integrantes de esa ¿CP? que, de manera cuasi clandestina, se reunió para decidir algo tan importante como el curso democrático futuro del mayor partido de la República Dominicana?”. Sin comentarios…
En todas partes
He escrito, y lo repito, que el arropante populismo, ya en el bajadero de clientelismo, que se siente en la política dominicana, ya no es exclusivo ni propiedad de ninguna de las organizaciones del sistema partidarista que nos gastamos, porque las prácticas, buenas y/o malas, a que recurren los dirigentes y/o aspirantes se están tornando en las mismas en todos los grupos. Y como para ejemplo basta un botón, ahí les va esta: En la intensa campaña interna de los que aspiran a ocupar puestos en el Comité Central del PLD, hay un aspirante de la Circunscripción 2 de San Cristóbal que aparentemente sintiéndose en desventaja frente a su contendiente está motorizando lo que se entiende como una campañita sucia contra su rival a través de medios locales, pero entre peledeístas de la zona se comenta, según me cuentan, que “el que tiene techo de cristal no debe tirar piedras al de su vecino, por lo que eso podría acarrear”. Además, que Demetrio Lluberes sea danilista y su adversario de Leonel no significa que alguno de ellos haya dejado de ser peledeísta. Las habas se cuecen en todos lados…!