La Primera Dama Cándida Montilla de Medina encabezó ayer el primer encuentro navideño con los niños y niñas del Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID).Al dirigirse a los asistentes, Montilla de Medina valoró el trabajo que realiza el CAID, en la sede de la institución ubicada en la avenida Luperón, en la capital, y los resultados logrados en los niños y niñas que reciben sus servicios, basados en el amor, la entrega y la dedicación de todo su personal.
Asimismo, resaltó el apoyo en esta tarea de las familias de cada uno de los niños y niñas con habilidades diferentes, que reciben asistencia en la entidad.
“Queridos padres de nuestros niños, ustedes constituyen la base fundamental en el desarrollo de sus habilidades. Su ayuda es determinante para su avance en las terapias, su compañía en las diversas sesiones o su apoyo en darles seguimiento en sus casas, es lo que sirve como zapata para erigir la confianza y seguridad de estos infantes”.
Unidad familiar
Montilla de Medina expresó que la unidad familiar y la solidaridad constituyen la esencia del período de Navidad, por lo cual es importante que las familias dominicanas se acojan a ese espíritu.
El equipo de profesionales de la sección Terapia del CAID hizo una presentación titulada “Visión y Amor”, basada en la labor que se realiza desde el centro y el resultado que obtienen tanto padres como niños.
En la actividad, la Primera Dama Cándida Montilla de Medina junto al director del CAID, Moisés Taveras, acompañados por los personajes de Santa Claus y otros personajes infantiles entregaron regalos y juguetes a los niños y niñas usuarios del centro.
Además, realizó un recorrido por las diferentes áreas que componen el CAID para observar hermosos detalles y manualidades construidas por los niños del centro, con motivo de la Navidad y que fueron entregados a sus padres, como símbolo del avance que registran sus muchachos, a quienes se les brinda atención integral y personalizada.
Algunos de los padres de los menores expresaron agradecimiento por la recepción que el CAID ha dado a sus hijos, y los avances que estos han experimentado durante el tratamiento.
