Lo expongo con sinceridad: El boxeo profesional de República Dominicana, en medio de sus angustiosos problemas, tiene un firme aliado…
¿Y quién ese aliado?
Johnny Jones, ingeniero civil, dirigente político, es, para satisfacción y agradabilidad de este columnista, un aliado del boxeo.
A Johnny Jones lo conocí (personalmente) durante la campaña electoral del año 2000 que tuvo como principales contendores a Danilo Medina, Hipólito Mejía y Joaquín Balaguer.
Yo realizaba el rol de reportero general -pero también escribía trabajos para la sección deportiva- cuando laboraba para el periódico Listín Diario.
Bueno, por una “especial circunstancia”, la dirección de Listín Diario, que para la época estaba bajo la égida del conocido periodista Mozart Deláncer, me designó como periodista de le redacción central.
Y dentro de ese desempeño me designaron para cubrir la campaña del candidato (a la reelección Presidencial) de Joaquín Balaguer. ¿Extraño? Entonces, en esos menesteres me tocó entrevistar a varios dirigentes del Partido Reformista Social Cristiano, entre ellos a Jones.
Ahí comenzó nuestra amistad, aunque informal, con Jones, quien nunca dijo no cuando le pedía alguna entrevista y a través de él pude, incluso, entrevistar a Balaguer.
En esta etapa, Jones, quien también es un reputado escritor (es ducho en escribir novelas), es un colaborador del boxeo.
Como secretario general de la Liga Municipal Dominicana, Jones le da su mano amiga al boxeo, un deporte que por tradición ha sido marginado por parte del Estado y de poderosos empresarios del sector privado.
El boxeo lo necesita
El boxeo necesita ese respaldo que hasta el momento viene ofreciendo al pugilismo local el ingeniero Johnny Jones.
El boxeo, que sigue siendo marginado en República Dominicana, necesita de respaldo.
Es lo que ha estado haciendo Jones. Es receptivo a las solicitudes de César Mercedes cuando va a montar una cartelera. El Estado nunca respalda el boxeo. El boxeo es la cenicienta del deporte.
