Pesar invade Cristo Rey por muertes

Fue su último aguinaldo. Sueños, viajes y proyectos quedaron calcinados junto a los cuerpos de cinco jóvenes, la madrugada del domingo, en la autopista Las Américas, tras perder el control del vehículo en que viajaban.La tragedia…

Fue su último aguinaldo. Sueños, viajes y proyectos quedaron calcinados junto a los cuerpos de cinco jóvenes, la madrugada del domingo, en la autopista Las Américas, tras perder el control del vehículo en que viajaban.

La tragedia invade a Cristo Rey. El pasado domingo, la barriada recibió los cuerpos irreconocibles de cinco jóvenes, uno de ellos, del ensanche La Fe, considerados por los vecinos como muchachos ejemplares, y cuyos cadáveres fueron enterrados una hora después de ser entregados por patología forenses.

Del accidente sólo sobrevivió Jonás Alejandro Paulino, de 22 años de edad, quien hasta ayer, se encontraba en estado crítico, al recibir lesiones de tercer grado en casi un 28 por ciento de su cuerpo, específicamente, en miembros inferiores, superiores y parte del rostro, según explicó Eddy Brito, director de la Unidad de Quemados del hospital Luis E. Aybar.

Para estas familias este diciembre “no será igual”. Así lo afirmaron moradores de la calle 39 de Cristo Rey, lugar que tantas veces reunió a estos cincos amigos que la noche del domingo luego de compartir un aguinaldo y tomarse unos tragos, decidieron salir rumbo a Boca Chica, pero al chocar contra un árbol la furgoneta Daihatsu Hijet, placa L 148418, donde viajaban, cuando se desplazaban por el kilómetros 17 de la autopista Las Américas, la muerte le sorprendió.

La foto de graduación de Samantha Jiménez permanecía, hasta ayer, en un altar en la sala donde siempre compartía con su madre, Maribel Hernández, quien hoy llora sin consuelo la muerte de su única hembra de tres hijos.

Con tan sólo 22 años, Jiménez estaba terminando la carrera de Idiomas y tenía planes de viajar para seguir preparándose académicamente.

Ejemplos del sector

“Mi niña fue la mejor estudiante, era obediente, yo la busco en cada rincón de esta casa y no la encuentro, ya no está”, dijo entre sollozos la madre de la occisa. “Confía en mí, mami, que yo te voy ayudar” fue la promesa que su hija más pequeña siempre le hacía, pero el trágico accidente, robó su esperanza y una parte de su vida.

Además, terminó inmediatamente con las vidas de Juan Albert Pereira Paulino, de 22 años; Carmen Leticia Pineda, de 24; Esterling Rafael García, y Víctor Manuel Mercedes, quien conducía el vehículo. Mientras que el mismo dolor lo comparte Luz de Carmen, madre de Leticia Pineda, quien deja en la orfandad una niña de dos años, en cuyo rostro se reflejaba la tristeza. Leticia trabajaba y tenía planeado estudiar turismo.

Mueren tres de la calle Higüey

El pesar se adueñó de la calle Higüey, tres familias lloran a sus muertos, entre ellos a Esterling Rafael García, quien trabajaba y cursaba su último año de secundaria. Este fue enterrado en el cementerio Cristo Salvador.

“Yo sé que tú me darás mi abrazo en Año Nuevo porque tú eras loco conmigo, manito” eran las palabras de una hermana del fallecido mientras enseñaba sus fotografías.

En la casa número 67 de la calle 39, donde vivía el fallecido Juan Albert Pereira (Yeison) siempre recordarán los momentos en que estos jóvenes compartían en la sala, donde ayer una vela alumbraba la foto del joven, quien presumía ser uno de los mejores técnicos de aire del sector. Familiares y amigos coinciden en decir que los jóvenes fallecidos eran alegres pero muy honrados.

Lamento
Esos muchachos compartían en mi casa y no tenían problemas, siempre estaban juntos, dijo la abuela de una de las víctimas

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