Es cierto. Ya se siente la brisa de Navidad. También la alegría, el compartir, la felicidad constante y contagiosa nos dice que ya estamos en la ansiada época, esa que nos recuerda nuestra niñez y adolescencia. Ahora, la ocasión es propicia para que todos nos recojamos y meditemos sobre el verdadero significado de esta tradición cristiana y, sobre todo, tratar de que los excesos y la prisa que nos envuelve a todos, no permitan que el luto llegue a nuestros hogares. Tomémoslo con calma, que más allá nos espera un nuevo año, una familia. La vida sigue.
Tomémoslo con calma
Es cierto. Ya se siente la brisa de Navidad. También la alegría, el compartir, la felicidad constante y contagiosa nos dice que ya estamos en la ansiada época, esa que nos recuerda nuestra niñez y adolescencia. Ahora, la ocasión es propicia para̷