La Nueva Barquita marcha a prisa. A medida que se levantan los edificios, crece la esperanza de cientos de familias que serán beneficiadas con el proyecto que tiene previsto entregarse en noviembre de este año. El tormento que representa la crecida del río Ozama y la contaminación imperante en los márgenes de este importante afluente ya no será un problema para más de 5,000 personas que han hecho vida alrededor del peligro.
Según explicó el director del proyecto, José González Cuadra, la Nueva Barquita va viento en popa. “Todo lo que es tema de vivienda va a toda marcha, supongo que en un mes tendremos del 60 al 70 por ciento de la viviendas listas, aunque sin terminación”.
González Cuadra indicó que el compromiso es que este año se concluya el 100% de todas las viviendas. Refirió que se encuentran trabajando en el sistema de agua así como en las plantas de tratamiento. El tema energético está en un proceso de licitación que en la próxima semana deberá adjudicarse, comunicó a elCaribe.
Anunció que van acorde con el cronograma de trabajo. Dijo, además, que tanto el centro clínico como el liceo y la estancia infantil presentan importantes avances.
Entonces, quedaría por licitar la iglesia, los edificios que albergaría Progresando, los bomberos y el destacamento policial, según explicó el encargado del proyecto de reubicación de La Barquita.
Sobre el liceo, dijo que la idea es que empiece a funcionar en la temporada escolar de agosto.
Educación y trabajo para La Barquita
En cuanto a la formación de los habitantes, ya empezaron los talleres de capacitación para que en momentos de la reubicación, los moradores tengan un mejor concepto de la forma de convivencia en una edificación distinta a la que estaban acostumbrados.
El nuevo proyecto mantiene entusiasmados a los moradores de La Barquita, ya que sus manos edifican el techo en que habitarán. Alrededor de 80% de la mano de obra proviene de ellos. Mientras que cerca de 15 contratistas trabajan en este proyecto. Muchos de ellos fueron capacitados en diferentes áreas. En la construcción se han destacado mujeres en áreas como la plomería. La “pequeña ciudad”, está ubicada en Las Javillas, Sabana Perdida, Santo Domingo Norte.
Transformarán espacio
En lo referente a lo que pasaría con La Barquita actual, expresó que desde que terminen de reubicar a las personas empezarán a transformar el espacio. Se había dicho anteriormente que en el lugar se realizaría un parque urbano.
En ese sentido, González Cuadra adelantó que además “habrá algo de gran interés para Los Mina relacionado con el tema educacional” Ayer Rafael Holguín, reconocido dirigente comunitario de La Barquita, lucía como un guardián que vigila su encomienda.
Exactamente así dice sentirse de este proyecto. Aseguró que “absolutamente nadie que no le corresponda una vivienda podrá obtenerla”. Manifestó que en el país es una costumbre que los políticos tomen los apartamentos de las personas que realmente los necesitan. Algunos residentes dijeron no estar incluidos en el segundo censo y dicen estar dispuestos a demostrar que tienen décadas viviendo en La Barquita.
