Negocios crecen en el entorno de Tavera

Santiago. Las comunidades levantadas en todo el entorno de la presa de Tavera han visto en los beneficios del agua y la energía las oportunidades de crecimiento económico.

Santiago. Las comunidades levantadas en todo el entorno de la presa de Tavera han visto en los beneficios del agua y la energía las oportunidades de crecimiento económico.Cada vez son más los negocios de restaurantes y casas campestres que son levantadas en la zona.

Y es que el embalse de Tavera, ubicado en la zona central del Cibao, representa un pulmón ecológico y comercial para la comunidad, que junto con aquellas zonas cercanas a la misma, se benefician de su producción.

Entre las facilidades que brinda la presa a las comunidades adyacentes está el suministro de energía hidroeléctrica y la pesca como principal fuente de trabajo.

Sandy Suriel, quien trabaja cerca de la fuente acuífera, opina que es necesaria la implementación de un sistema de regulación para los pescadores, con el objetivo de que no se produzcan agresiones a las crías de peces muy jóvenes.

Mejoramiento

Víctor Adriano Arias, quien trabaja en la vigilancia de la presa casi desde sus inicios, comentó que ahora se planea una ‘’liberación’’ de dos millones de peces gracias a los esfuerzos en conjunto de organizaciones como la Cooperativa Vega Real y el Ministerio de Agricultura.

La medida busca la reproducción de los peces para que los miembros de la comunidad y los moradores de la presa se beneficien.

Arias expresó que durante los tres meses en que se efectuará la liberación, se debe asegurar un sistema de incentivo o subsistencia para los pescadores cuyas labores se verán paralizadas.

Suriel afirma que hace falta control de las criaturas por parte de los mismos pescadores y la comunidad, de manera que si hay suficiente producción, no haga falta una liberación. Plantea un sistema de regulación que impediría la libre pesca de quienes sobreviven de la pesca. 

Aguardan mayor apoyo de las autoridades

A pesar de los aportes, las comunidades reciben un pobre servicio tanto de agua potable como de energía eléctrica. La comunidad estima que por materia de agua y energía, la presa solamente aporta más de diez millones de pesos a diario. A esto se suma los negocios establecidos en la zona y los que viven de la pesca. Los lugareños esperan mayor apoyo.

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