El Congreso Nacional es quizás el poder del Estado que sufre más críticas. Con frecuencia se habla mal de su desempeño y de los privilegios de sus miembros.Las autoridades que encabezan las cámaras han hecho sus esfuerzos para mejorar la imagen del Congreso. Hay que reconocer que los órganos de composición masiva y variada difícilmente escapen de comportamientos “fuera de lo común”.
Lo importante es que los legisladores tienen un papel importante como expresión directa de la voluntad popular. Les corresponde crear las normas legales que rigen la vida de la República. Una tarea delicada que siempre requerirá de disposición, creatividad y responsabilidad de sus miembros.
En efecto, muchos sectores esperan lo mejor del Congreso. Tantas son las misiones que tiene por delante que bien llevadas pueden contribuir a mejorar su percepción en la sociedad.
Los actores políticos y la ciudadanía en general están atentos a lo que hará el Congreso con la creación de un nuevo marco legal para el sistema electoral y los partidos políticos.
También se espera de una nueva ley que regule el funcionamiento de la Policía Nacional, tan importante en la lucha contra el crimen. Asimismo, una nueva legislación debe surgir sobre el tránsito y la transportación; sobre la tenencia de armas de fuego; la reforma de la Ley 87-01 del sistema de seguridad social, lo mismo que las leyes complementarias de la reforma constitucional de 2010 y otras iniciativas clave para la modernización del Estado dominicano.
La Presidencia de la República tiene la vista puesta sobre importantes piezas. Coincide con diversos sectores en la urgencia que requiere la aprobación de la ley orgánica de la Policía, lo mismo que la de tránsito y transporte terrestre, la actualización de la ley de industria, comercio y pimes, la Red Única del Servicio Nacional de Salud; la carrera sanitaria; Sociedad de Garantía Recíproca; Quiebras, y la transformación del Banco Nacional de la Vivienda, entre otras.
Si las cámaras hacen su tarea, mejorará la imagen de sus miembros. ¡Y es tan fácil!
