Las niñas y adolescentes de República Dominicana quedaron representadas, por primera vez, en la Comisión de Condición Jurídica y Social de la Mujer de la Organización de Naciones Unidas -ONU-, con una sanjuanera de 16 años.
Alondra Yulissa participó en la sesión 59 de este organismo en la sede de la ONU, en la ciudad de Nueva York, desde el 9 al 13 de marzo. “En el marco de las actividades estuvimos compartiendo las problemáticas que afecta nuestro el país como el embarazo en la adolescencia, violencia de género, desigualdad social y la poca participación política que se les dan a las niñas… Digo niñas porque eso también es un problema, siempre se habla de la mujer pero no se especifica que la niña tiene derechos”, destacó.
En una visita que hizo a elCaribe, esta joven explicó por qué fue elegida como representante nacional de la infancia y la niñez en esta entidad. Y es que la mitad de su vida la ha dedicado a la labor de comunitaria y hoy día es coordinadora de la región sur de la agencia de cooperación Cuerpo de Paz y representante de la niñez y adolescencia en el Directorio Municipal de San Juan.
Su comienzo en labores comunitaria arranca a sus ocho años en su comunidad Hato de Padre. Siendo una niña se integró al Cuerpo de Paz y al Plan Internacional en República Dominicana, organización de promoción a los derechos de la niñez y desde donde desarrolló su liderazgo, como ella misma comentó a elCaribe.
A sus 10 inició en la radio como colaboradora del programa “Child Media” y tres años después se convirtió en su conductora. A 14 años, se integró en la campaña Por ser niña, como ejecutora de su comunidad. Yulissa fue una de las cinco adolescentes que llevó Plan Internacional a ésta Comisión de la ONU.
De su experiencia acumulada Yulissa concluye que lo que más falta hace a la sociedad para acabar con problemáticas como el machismo es la educación. “La educación es la base de todo y no solo se necesita una educación básica, media y universitaria… Para cambiar el machismo y la desigualdad de género hay que trabajar con los hombres. Debemos cambiar la cultura de nuestro país”, subrayó.
Sugirió la inclusión en el sistema educativo de asuntos como el empoderamiento juvenil, la educación sexual y reproductiva y los derechos humanos, “para que los jóvenes no solo sepan de matemáticas y lenguaje, sino que aprendan cosas que les ayuden a crecer como persona”.
Alondra Yulissa vive con sus padres y sus dos hermanos de 21 y 23 años, este último diagnosticado con distonía muscular. “Creo que es por mi hermano mayor mis ganas y mi sed de aprender. No tolero la discriminación”, concluyó la adolescente.
