Para Carlos Gómez, la ambición de querer lograr muchas cosas en una temporada, es, en cierto modo, perjudicial. Es por eso que el jardinero de los Cerveceros de Milwaukee no se traza metas cada vez que llega la temporada de las Grandes Ligas.
“No soy de esas personas”, dijo Gómez en una entrevista concedida a Manny Mota para elCaribe desde los campos de entrenamiento del equipo en Arizona. “Mi principal y única meta que siempre me he propuesto cada vez que llega la temporada es que Dios me dé salud y poder jugar los partidos que tiene el calendario”, agregó.
Sostuvo que jugar día a día es la principal motivación que tiene, punto, que a su juicio, lo convierte en un pelotero indispensable para las aspiraciones de su equipo. “Muchas veces lo que te hace bien, termina mal para ti. No vivo trazándome metas. Lo único que aspiro es poder jugar día a día y aportar la cantidad necesaria de victorias para mi equipo, sea con mi guante o sea con el bate. Al final de la temporada, ahí es donde sabrás si hiciste las cosas bien o mal. Los números que lograste durante ese trayecto tendrán la última palabra”, sostuvo el patrullero de los Cerveceros. Y es que a la ofensiva, el nativo de Santiago de los Caballeros, promedió .284 en 574 partidos con los Cerveceros, con 163 imparables (se incluye 34 dobles, cuatro triples y 23 jonrones) la campaña pasada. Remolcó 73 carreras y anotó 95 en 148 partidos, registrando así, la mejor temporada de su carrera en las Grandes Ligas desde su llegada en 2007 con los Mets de Nueva York.
Mientras que a la defensa, el patrullero central participó en 1,270 entradas defendiendo la posición ocho en 145 partidos, de los cuales 144 fueron de juegos completos; y capturó 355 pelotas en 367 oportunidades. Asimismo, tuvo siete asistencias, erró en cinco ocasiones y participó en dos dobles matanzas.
“En eso es que más me concentro”, señala el dominicano, que además de los Mets también militó con los Mellizos de Minnesota antes de desempacar maletas en Milwaukee en 2010. “Me concentro en hacer mi trabajo. Es bueno poder lograr muchas cosas en el terreno de juego, pero más agradable es ver que tu equipo gana partido tras partido”, agregó.
Se consideró un jugador que no vive poniéndose metas durante el desarrollo de la temporada, aunque no esconde el deseo de colocar importantes números a su registro personal. “En septiembre, por ejemplo, uno quiere terminar la temporada muy bien. Si tienes 28 jonrones, quieres terminar con 30. Si tengo 35, quiero llegar a 40, pero muy temprano en la temporada cuando te enfocas en números como 162 juegos, en vez de hacerte bien, lo que te hace es mal”, sostuvo Gómez.
Sobre los movimientos que los Cerveceros realizaron durante la temporada muerta, Gómez mostró su satisfacción por la llegada de importantes hombres que, a su juicio, podrán ser de gran ayuda para que el equipo pueda llegar más allá de los playoffs en esta temporada. Entre los hombres que llegaron a Milwaukee está el inicialista Adam Lind, procedente desde los Azulejos de Toronto, a través de un cambio por el lanzador mexicano Marco Estrada.
