Cambios en Cenapec

Desde que comencé a trabajar en los medios, por allá por el 1979 en la legendaria Radio Enriquillo, en Tamayo, Sur del país, me abracé al llamado periodismo de servicio. Es más, llegué a esa emisora desde los grupos populares a los que pertenecía, pues en la radio veía la oportunidad de reforzar mi relación con ese segmento de la población. Cuando llegué a Santo Domingo a trabajar en el desaparecido periódico El Siglo me tocó “cubrir” fuentes vinculadas al movimiento popular; y cuando Osvaldo Santana llegó como director ejecutivo a ese diario, se hizo una especie de reinversión dándole más importancia al periodismo vinculado a la comunidad. Así se crearon las secciones “Las Regiones”, con dos segmentos: “Las Provincias” y “La Capital”. Entonces me tocó la producción y edición de esa parte del periódico. Fue como una continuidad de ese periodismo que procura darle participación a esos sectores que no tienen espacios para manifestar sus inquietudes y dar a conocer sus iniciativas sociales, deportivas, reivindicativas y productivas. Luego que salí de los periódicos, conservo esta columna en el Caribe, en la que mantengo esa vocación de ser una canal de expresión entre la gente que no tiene acceso a estos medios masivos y los sectores que están llamados a resolverles sus problemas. Fue dentro de ese espíritu que describí el drama que vivían cientos de estudiantes adultos que decidieron terminar sus estudios del bachillerato a través del Cenapec ¡Y que bien me siento por esto! Tras publicarse la columna recibí llamadas de la Dirección de esa institución para ver si obtenían más detalles de lo planteado en la columna y de corregir las anomalías. ¡Y así ha ocurrido! En todo ha cambiado para bueno. Desde la atención a los usuarios en llamadas telefónicas, hasta la entrega de las unidades a utilizarse en las clases presenciales. Las notas que no aparecían, aparecieron, los materiales para las clínicas de cara a las Pruebas Nacionales a los del 4to de bachillerato están disponibles en las oficinas. Tremendo ejemplo ha dado Cenapec. Ellos me confesaron que lo escrito en elCaribe le sirvió de alerta para reencauzar sus objetivos, darles a sus alumnos la oportunidad de estudiar y progresar. Bien por Cenapec y bien por sus alumnos que buscaron un medio para dar a conocer su inquietud y lo encontraron en esta columna de elCaribe.