Boca Chica. Autoridades congresuales, líderes comunitarios y miembros de los sindicatos de transporte de Boca Chica niegan que se haya intentado secuestrar, quemar y amenazar a un grupo de estudiantes en la comunidad Andrés.
Durante una rueda de prensa, las autoridades del lugar lamentaron el incidente ocurrido la pasada semana, cuando un grupo de estudiantes del Colegio Evangélico Episcopal San José, de la comunidad Andrés, fueran impedidos de ir a la feria debido a que no se contrató el servicio de transporte de esa localidad.
Calificaron de exagerada la actitud del Ministerio Público, asegurando que no investigaron como es debido y que “en ningún momento” se intentó secuestrar el autobús y mucho menos se dijo que lo quemarían. La Asociación de Choferes de Minibuses de Boca Chica (Asochombca) y del Sindicato de Choferes Propietarios de Boca Chica (Sichoproboch), expresó que el colegio no se querelló contra ellos y que luego del incidente sigue utilizando sus servicios.
Aseguraron que muchos de los estudiantes que iban en ese trasporte son hijos y parientes de los choferes de esa localidad y que jamás atentarían contra la vida de ellos. Refieren que el manejo que se le ha dado a la información le hace daño al turismo y a la comunidad.
“Todos esos comentarios (quemar el autobús) son falsos. Hay un video que yo quiero que las autoridades lo analicen detenidamente para que vean que ahí no hubo nada de eso, incluso los niños están hasta saludando en la guagua. Que ahí no hubo un intento de terrorismo porque nosotros somos padres de familia y los niños de nosotros son los que van a los liceos y los colegios”, aseguró Modesto Santana, secretario de general de Asochombca.
“Nosotros apelamos, no a que las cosas incorrectas se complazcan, porque tenemos que ser justos de un lado y de otro, pero que se haga la investigación de fondo para que se aclaren todas las cosas”, refirió el pastor Milcíades Rodríguez.
Ramón Méndez, quien dijo ser la persona que grabó el video que está circulando en las redes sociales, así como la señora Servilia Santana, residente en la casa frente a la cual se produjo el hecho, aseguraron que “nunca hubo intención de hacer daño a los niños.
