Colombia._ El presunto asesino del diputado chavista Robert Serra llegó a Caracas el sábado tras ser extraditado desde Colombia, y fue conducido en detención de inmediato por el Servicio de Inteligencia, se informó oficialmente.
El ministro venezolano de Interior y Justicia, Gustavo González, recibió en el aeropuerto internacional de Maiquetía a Leiver Padilla, conocido como «El Colombia», un supuesto paramilitar que es señalado como quien mató en octubre pasado al diputado Serra y a su asistente María Hogdalis Herrera.
«Hemos concluido con la extradición de Leiver Padilla, quien buscó refugio en otro país para evadir a la justicia», indicó González desde la cuenta de Twitter del Ministerio, donde también se publicaron dos fotos que muestran a Serra rodeado de policías.
Padilla, ciudadano colombovenezolano, «es acusado de los delitos de homicidio agravado, robo agravado cometido a mano armada y asociación para delinquir», según precisa en la jornada una nota publicada por la agencia oficial de noticias AVN.
El presidente venezolano Nicolás Maduro agradeció, por su parte, la colaboración de Colombia, cuyas unidades policiales capturaron a Padilla en noviembre en el balneario de Cartagena. Luego, el 30 de abril, la Corte Suprema de Justicia de Colombia aprobó su extradición.
«A los terroristas y asesinos que atacan nuestra patria, los buscaremos hasta debajo de la tierra», escribió Maduro en su cuenta de Twitter.
Por el asesinato de Serra, el Ministerio Público de Venezuela ha detenido a 10 personas, entre ellas a Edwin Torres Camacho, alias «El Poli», el jefe de escoltas del diputado, quien habría participado del crimen, tras ser sobornado.
Serra, abogado y exlíder estudiantil que hizo contraparte a las protestas de estudiantes alineadas con la oposición en 2007, fue electo diputado en los comicios de 2010, cargo que asumió meses más tarde a sus 23 años, convirtiéndose entonces en el miembro más joven de la Asamblea Nacional.
Maduro ha dicho que el político fue asesinado luego de una componenda entre paramilitares de la que habría hecho parte el expresidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010), quien niega tal acusación.
