Bayaguana. En interés de propiciar en los estudiantes el conocimiento y cuidado del medio ambiente y la agricultura, el empresario Juan Portes trabaja para conformar una “escuela granja”. Para eso requiere de sinergia con instituciones públicas.“Lo que procuramos es que los estudiantes vengan aquí, puedan conocer las distintas especias que cultivamos en esta finca y conozcan el porqué de las cosas”, dice Portes al equipo de elCaribe que recorrió el municipio Bayaguana, en procura de escribir reportajes sobre diversos rubros.
“A veces la gente se come una yuca y no sabe de dónde sale. La idea es que en los talleres que se impartan aquí, en una semana de campamento, los estudiantes aprendan todo eso y mucho más sobre la conservación del medio ambiente”, indica.
El lugar dónde se proyecta levantar el centro de formación, en una zona alejada en Bayaguana, se denomina “Granja Escuela los Embajadores”. La granja escuela, según explica Portes, es una modalidad que se ha desarrollado en Europa, Estados Unidos y los países latinoamericanos con alto desarrollo, como Argentina y Chile con resultados satisfactorios. Esos centros están destinados a acercar a los niños a la realidad rural que a menudo desconocen.
Asegura que para que el proyecto camine trabajaría de cerca con instituciones como los ministerios de Medio Ambiente, Agricultura, Educación, Salud Pública, y el de Defensa, así como en Centro de Operaciones de Emergencias (COE). “Esto abarca todo, es algo integral, es lo que se llama traer el aula escolar al campo.
Se han dado pasos y se busca obtener la certificación del Ministerio de Medio Ambiente para poder impartir las 60 horas de labor social que es un requisito con el que deben cumplir los estudiantes de cuarto de bachillerato para poder titularse como bachilleres”, plantea Juan Portes. Y agrega: “La idea es crear junto al sector público un mecanismo que permita impartir las 60 horas, divididas en 30 horas de medio ambiente y 30 de labor social”.
Asegura que, por el lugar donde está la escuela y lo que haría es probable que algunos de los bachilleres que acudan a ella se animen luego a estudiar agronomía, que en los últimos años ha estado en baja en algunas de las academias de estudios superiores del país (universidades).
El área donde se instalaría la escuela es de un terreno de 700 tareas, de las cuales hay ya 300 sembradas de malagueta, “berrón”, canela, pimienta, nuez moscada, clavo dulce, citronela (es una hierba de la cual se saca esencia de manera natural) y stevia, entre otros rubros.
Se requiere ir dando bien el cambio generacional
El propulsor de la escuela-granja asegura que si República Dominicana educa el campesino para que viva mejor, tendrá en el futuro un país y un panorama mejor. A lo que se refiere es a la importancia de que haya un cambio generacional del productor, con una visión nueva y mejores técnicas de cultivo. “En muchos campos del país hay gente que ni siquiera produce lo que se come. En cambio, hay otras regiones con altos niveles de producción”, dice.
