Unas 1,500 tareas de San Cristóbal están siendo explotadas con extracciones de agregados por las constructoras Bisonó y Alba Sánchez, lo que preocupa a grupos ecologistas y comunitarios de la provincia, que entienden que las empresas atentan contra el medio ambiente.
Las empresas constructoras Bisonó y Alba Sánchez operan una planta procesadora cada una, ubicadas en la comunidad de La Jagua, en el municipio de Yaguate, las que procesan más o menos 300 metros cúbicos de agregados al día (entre 120 y 150 camiones diarios), los cuales se extraen de las minas del lugar.
Así lo revelaron a este diario los empresarios Rafael Bisonó Cambiaso, presidente de Industrias Bisonó, y Alfredo Alba López, director de la División de Agregados de la constructora Alba Sánchez.
La preocupación de los ambientalistas se plantea al observar un panorama casi desolador a ambos lados de la autopista 6 de Noviembre a la altura de La Jagua, en el municipio de Yaguate, debido a los trabajos de extracción de agregados que realizan ambas empresas.
Ayer, elCaribe publicó que entre las provincias de San Cristóbal y Peravia operan unas 40 empresas dedicadas a la extracción de arena y agregados, y la mayoría no respetan el medio ambiente ni a los núcleos humanos que las circundan, desarrollando la actividad bajo la lógica de la depredación de ríos y suelos.
De acuerdo con la publicación, la situación, en gran medida ocurre con el permiso del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, otras de forma furtiva e irregular.
Rafael Bisonó y Alfredo Alba Sánchez: “Cuidamos la tierra”
Aunque admitieron que el panorama que se observa desde la carretera no es bonito, tanto Bisonó Cambiaso como Alba López afirmaron a elCaribe que sus plantas operan bajo normas amigables con el medio ambiente y que preservan la productividad de la tierra.
En el terreno, invitaron a este diario a contactar la forma diferente en que sus empresas realizan dicha actividad, explicando el proceso de extracción y el programa de reforestación y recuperación de la tierra, señalando que en la República Dominicana son las únicas empresas que extraen arena y agregados de manera racional y tratando de ser lo más amigable con el medio ambiente.
“Nunca se cava más allá de los cinco metros, pues el nivel freático (distancia a la que se encuentra el agua desde la superficie del terreno) está a unos 8.5 metros, y no cavamos más profundo porque debemos cuidar los acuíferos y permitir que la tierra se recupere y vuelva a producir”, explican.
Rafael Bisonó Cambiaso observó que la preservación de capacidad de producción de los terrenos donde operan ambas plantas es parte esencial del acuerdo con el Grupo Vicini, propietario de los terrenos en los que operaba el ingenio azucarero Caei.
Proyectos sostenibles
Igualmente, ambos empresarios mostraron los proyectos de reforestación, recuperación de la tierra, piscicultura y otros que llevan a cabo, como es el apoyo directo a la comunidad de La Jagua, el cual piensan ampliar y profundizar con la puesta en marcha de un programa de responsabilidad social empresarial que va más allá de la simple obligación, ya que “es algo que nos gusta”.
El objeto es establecer una cobertura boscosa densa que devuelva a la zona intervenida el verdor natural, restableciendo el ciclo hidrológico, estabilizando el ecosistema y preservando suelos y aguas.
“Con la implementación de un correcto plan de conservación de suelos estamos dando seguimiento a las políticas ambientales que desde hace varios años se vienen implementando en nuestras empresas, lo que garantiza la recuperación de los suelos después de ser minados, promoviendo así la protección y el cuidado del ambiente”, apuntaron.
“Comprendemos que lo que la gente ve desde fuera, desde la carretera, no es bonito, porque lo que ven es la parte donde se están extrayendo materiales, y eso es como una construcción, que cuando se está excavando, cuando se están poniendo los bloks, se ve fea, pero cuando se va terminando, la vista cambia de feo a bello”, dice Rafael Bisonó Cambiaso.
“Tenemos sembrada una inmensa cantidad de árboles frutales y maderables, como son mango, cajuil, baitoa, trinitarias, samán, flamboyán, palma, guandules, batata, mara, caoba, guayacán, cedro, grigí, pino, penda, almendras, caracolillo y almácigo, y si no los se ven más altos es porque en la zona hace más de dos años que no llueve”, dijo Bisonó Cambiaso.
Igualmente, está en su etapa inicial un proyecto de cría de pescado en agua dulce, iniciado con unos 4,000 alevines, y que ya aporta pescados de hasta tres libras.
“Los planes son ampliarlos y este pescado proporcionarlo a la comunidad, a fin de mejorar su alimentación, porque también desarrollaremos proyectos agrícolas pensando en los habitantes de estas zona”, explicaron Alba Sánchez y Bisonó Cambiaso.
LOS EXPERTOS
Rafael Bisonó Cambiaso
Presidente de Industrias Bisonó
“Una de nuestras principales preocupaciones es la calidad de la vida de los habitantes de la comunidad de La Jagua, y por eso procuramos emplear a la mayor cantidad de sus habitantes, por lo que buscamos formas de contribuir mucho más en salud y educación”.
Alfredo Alba López
División de agregados de Alba Sánchez
“Cuando se concluye el proceso de minado en un área determinada, de inmediato se inicia el proceso de recuperación de la tierra, devolviéndole su capa vegetal y cuidándola hasta que esté totalmente recuperada y en condiciones de producir alimentos”.
