El coordinador de la Comisión de Veeduría de la Presidencia, Javier Cabreja, defendió ayer los aportes de estos instrumentos ciudadanos conformados por el Poder Ejecutivo para fiscalizar los procesos de compra en las distintas instituciones públicas.
El exdirector ejecutivo de Participación Ciudadana afirmó que tras la puesta en marcha de las veedurías, los proveedores tienen más confianza en los procesos de contrataciones en los que participan, y ven en estos instrumentos un canal para presentar denuncias, quejas y cuestionamientos.
Aseguró que las comisiones operan con total independencia, tal y como establece el decreto que ordena su conformación, sin recibir órdenes por parte de las instituciones públicas o de la propia Presidencia.
“Gran parte de la gente que está en estas comisiones, ya algunas tienen mucha trayectoria de trabajo social y profesional en distintas áreas, y muy difícilmente a esas personas una institución pública o un sector en particular lo pueda controlar, lo pueda manejar, lo pueda manipular”, aseguró.
No obstante, reconoció que existen retos y desafíos por superar, ya que en algunos casos los miembros de las comisiones no pueden realizar su labor de manera expedita, ante las trabas impuestas por algunos que ven con recelo su labor.
“Algunos funcionarios públicos tienen que entender que el ejercicio de monitoreo y de control social es un derecho que tienen los ciudadanos y no viene ni a cuestionar ni a suplantar la labor que hacen los funcionarios públicos”, advirtió.
Cabreja también reconoció que debe haber un mayor esfuerzo por parte de las comisiones de rendir cuentas ante la opinión pública sobre el trabajo que están realizando,ya que muchas de ellas han producido bastantes informes sobre los procesos que desarrollan, los cuales son presentados a la institución a la que están adscritas.
Cabreja afirmó que el propósito final de una veeduría no es de detectar casos de corrupción, sino que los procedimientos de compras que lleva a cabo el Estado tengan la eficiencia y la transparencia necesarias para brindar servicios de calidad a los ciudadanos.
Dijo que durante esta fase se ha estado trabajando en la formación y capacitación de los miembros, en la elaboración del reglamento interno y el fortalecimiento institucional.
Dijo que se trata de una experiencia nueva que toma tiempo consolidar, por lo que no es responsable cuestionar su efectividad.
No pretenden sustituir entidades fiscalizadoras
Dijo que las veedurías no vienen a sustituir a las instituciones de fiscalización, sino a complementar su labor y que las mismas fueron creadas por el Gobierno para que ciudadanos independientes monitoreen sus procesos, “eso tiene que ser bienvenido, tiene que verse como una oportunidad para que las organizaciones de la sociedad civil incidan en un proceso tan importante como las compras públicas que alcanzan cerca del 30% del presupuesto”.
