El padre Luis Rosario favorece el desarme general a la población y recomienda congelar los permisos de Interior y Policía para el porte y tenencia de armas.Asimismo, apoya los esfuerzos realizados por el Procurador General de la República en lo referente a iniciar un diálogo con las autoridades, para buscar soluciones viables y lograr el desarme de la población. Otros puntos que plantea es exigir que los miembros de la Policía Nacional y militares lleven armas de fuego si no están en servicio, así como prohibir el exhibicionismo de estas en áreas concurridas.
Mediante una comunicación, el prelado católico solicita implementar operativos de desarme en forma conjunta por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, bajo la dirección del Ministerio Público.
El sacerdote pide a las autoridades entender la urgencia de crear las condiciones para que en el país se produzca un desarme general de la población, para que exista convivencia civilizada.
