Moca. El estado de miseria de Magalis López ya era crítico y se agravó con dos tragedias que le cayeron de golpe. En solo dos días perdió a su esposo y su vivienda.Al otro día de perder a su esposo, con quien procreó tres niños de siete, tres y de un año y ocho meses de edad, vio cómo la casucha de madera y cartón se desplomaba al caerle un árbol, en un hecho ocurrido en la comunidad de Jábaba de Moca, provincia Espaillat.
Con el paso de los días, Magalis ha recibido promesas, como la de entregar 800 blocks para la construcción de una vivienda digna en la que pueda ver crecer a sus hijos.
Otras dos personas prometieron entregar diez mil pesos para comprar alimentos para los niños. Sin embargo, ninguna se ha cumplido.
“Por aquí vino el diputado Carlos Alberto García y mandó a un ingeniero para que midiera el terreno que me está facilitando mi suegro e iniciaran la construcción de otra casita, pero al parecer lo ha olvidado”, expresó Magalis López al hablar con reporteros de elCaribe.
En los primeros días tuvo que cubrirse con las tablas que quedaron, pero por las noches quedaba prácticamente a la intemperie, por lo que junto a sus hijos tuvo que refugiarse en la estrecha casa de su suegro Miguel García, padre de Manuel García, quien falleció en un accidente de tránsito el día 19 de julio pasado.
“Yo solo necesito una casa mejor para criar a mis hijos. Ahora que no tengo a mi esposo, las cosas son más complicadas”, sostuvo López.
Desde que murió su pareja, Magalis ha vivido momentos de angustia, y lo peor es que no sabe adónde acudir.
En el día de ayer, su hijo más pequeño tuvo que ser ingresado en un centro de salud afectado de problemas gripales, ya que la precariedad y hacinamiento en que viven, también les afecta la salud. Solo espera la mano amiga de alguna persona que cuente con los recursos económicos para aliviar su pesada carga. Los interesados en colaborar con esta noble causa pueden llamar al teléfono (829)-394-9481.
