Desafíos del presidente candidato

Sin dudas el presidente Medina, proclamado candidato presidencial del PLD, conoce que entre los temas más relevantes que afectan a la sociedad dominicana está la seguridad ciudadana.

Sin dudas el presidente Medina, proclamado candidato presidencial del PLD, conoce que entre los temas más relevantes que afectan a la sociedad dominicana está la seguridad ciudadana.Por sensible e inmediato la seguridad ciudadana ha impactado y recogido a la población. En lo que va de este cuatrienio de gobierno se retrocedió porque el Ministerio de la Presidencia desconoció todo lo que se había hecho.

Es siempre necesario reiterar que la seguridad ciudadana es un tema multicausal, por lo que su tratamiento es integral. Está comprobado que su manejo se hace inapropiado cuando el Estado adolece de debilidades en sus instituciones.

Igualmente está comprobado que la violencia proviene muchas veces con tasas más altas por conflictos en la convivencia social, que de la delincuencia. Sin embargo, los robos y asaltos producidos por la delincuencia tienen fuertes impactos en la percepción creando cierta angustia social.

Efectivamente, no es igual un asalto que una riña entre amigos en un centro de diversión; ni un asesinato por conflictos de pareja que el ocasionado a propósito de un asalto.

Debemos entender que si la seguridad ciudadana es la garantía que debe dar el Estado para el ejercicio de los derechos, lo primero que debe hacer el Gobierno es preparar una policía profesional, bien formada, debidamente equipada y con una escala salarial en atención al escalafón de su carrera.

Es indiscutible que la PN no está en capacidad de cumplir su atribución. El problema no es su marco legal, por tanto nada se hace cambiando su ley. Es su estructura organizacional que no se respeta porque hace tiempo se rompió su línea de mando; porque los ascensos violentan su carrera; porque sigue teniendo una cultura represiva que antes era desaguada contra los opositores a los gobiernos y ahora para proteger la búsqueda de fortuna en su seno o hacia afuera de la institución; porque ella sirve para resguardar lo que debe combatir.

Las políticas públicas sobre seguridad ciudadana tendrán un nudo con esa PN. Es totalmente cierto que de ella habrá brotes cada vez más frecuentes de agentes participando en acciones ilícitas.

Procede diseñar un plan de evaluación y depuración de su personal activo y organizar reentrenamientos y nuevas orientaciones en la técnica policial. En este mismo sentido desarrollar un programa de formación masiva de nuevo personal policial, partiendo de un perfil con base académica y de escolaridad universitaria.

Los instrumentos académicos para esa formación policial y de reentrenamiento están elaborados a propósito del ingreso masivo que se inició desde el Ministerio de Interior y Policial, el cual empezó con la preparación de Policías Auxiliares.

La formación de oficiales hasta con maestría y PHD, su programación se facilita con universidades y hasta academias policiales que han mostrado disposición para esos programas de capacitación, poniendo de relieve la universidad John Jay College de New York.

Con alguna frecuencia se escuchan comentaristas de programas de radio y TV que cuestionan debilidades en el manejo del tema y parecen olvidar que tengo cuatro años y medio fuera del Ministerio de Interior y Policía, cuando aún era presidente el Dr. Leonel Fernández.

Este es un tema de mucha seriedad para la sociedad dominicana y constituye un gran desafío para el Gobierno, por lo que debe dársele un tratamiento de Estado.

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