¿Dónde habitamos?

El comportamiento de un grupo de jóvenes durante el accidente de un helicóptero en Maquiteria, en Villa Duarte, ¿retrata a los dominicanos? Quizás la respuesta más equilibrada sea no. Puede que haya un si condicional u otra respuesta más filosófica

El comportamiento de un grupo de jóvenes durante el accidente de un helicóptero en Maquiteria, en Villa Duarte, ¿retrata a los dominicanos? Quizás la respuesta más equilibrada sea no. Puede que haya un si condicional u otra respuesta más filosófica: Hay muchas expresiones del ser dominicano.

Hace ya muchos años, quizás una década, o más, que el sentido de solidaridad empezó a disminuir. Cuando los más viejos éramos niños, ante un accidente fatal en la vía pública todos acudían a brindar auxilio, con un alto sentido de respeto. Primero por la integridad de las personas y sus bienes.

¿Qué empezó a ocurrir en las carreteras del país hará unos años? Ante un accidente, desaprensivos suelen despojar a las víctimas con desdeñosa y desconcertante mirada. Hay relatos de personas accidentadas que cuentan que han sido atacadas para consumar los despojos. No hay límites.

Lo de Maquiteria es un cuadro horroroso. No lo protagonizó toda la vecindad que lo permitió como si no pasara nada. ¿Qué elementos de la sociedad dominicana reflejan ese comportamiento? ¿Es parte de “la lucha” por sobrevivir? No. Es una contracultura desintegradora que se desarrolla en zonas “urbanas” donde el acceso es difícil, la habitabilidad responde a unas convenciones singulares y surgen unas relaciones de “solidaridad y poder” donde predominan los más fuertes.

Imponen las reglas determinados elementos capaces de organizarse y actuar, con espíritu solidario para delinquir. A veces, los débiles representantes de la autoridad optan por mirar hacia otro lado, o simplemente, prefieren acomodarse a esa realidad en el entendido de que preservan sus vidas. La ley es una lejana referencia y el sentido de las instituciones es precario, incluida la familia que hemos conocido hasta ahora.

Que un helicóptero colapse sobre una esquina de un barrio, que una turbamulta “auxilie” al piloto, con la vista y las manos puestas sobre sus prendas y bolsillos, y “solidariamente” lo salven… en medio de un cuadro desconcertante donde jóvenes literalmente proceden a incautarse de un bien, desarman y cargan con partes del aparato… Es para morir de espanto y desconcierto.

¿Dónde habitamos?

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