Juez dicta prisión y declara caso OISOE complejo

Ocho meses de prisión preventiva fueron dictados ayer por el juez de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, Alejandro Vargas, contra de los tres acusados de extorsión, estafa y asociación de malhechores desde la OISOE.

Ocho meses de prisión preventiva fueron dictados ayer por el juez de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, Alejandro Vargas, contra de los tres acusados de extorsión, estafa y asociación de malhechores desde la OISOE.La esposa e hijos del arquitecto David Rodríguez, quien se suicidó en el baño de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado, se querellaron contra el exdirector de esa entidad, Miguel Pimentel Kareh, José Florentino, director técnico del organismo así como contra Alejandro de los Santos Serrano, Yoel Soriano Fabián y Julio Rafael Pérez Alejo, enviados a cumplir la prisión en la cárcel de La Victoria.

Pilar Montilla de Rodríguez y Sneel David Rodríguez Montilla, los acusan de ser los responsables de que su esposo se haya suicidado, así como de prevaricación, extorsión, coalición de funcionarios, evasión fiscal, lavado de activos y asociación malhechores, falsedad en escritura pública, soborno y estafa.

El caso fue declarado complejo por el magistrado Vargas por entender que de acuerdo a la solicitud presentada por la Procuraduría especializada de Persecución a la Corrupción Administrativa (Pepca), a la que se adhirieron los familiares del arquitecto, existe una pluralidad de imputados así como víctimas y delitos.

Vargas expresó que en el caso se puede establecer que se estuvo realizando un negocio desde el Estado y eso lógicamente tiene que tener una sanción. La revisión obligatoria de la medida será en el mes de diciembre en el Cuarto Juzgado de la Instrucción del Palacio de Justicia.

Estableció que hubo extorsión y que los acusados como empleado y exempleados de la institución no estaban para resolverles problemas a los ingenieros que tenían retrasos con sus obras, sino supervisar las construcciones o las edificaciones escolares.

“Miren esto que en papeles parece frío (en referencia a la solicitud de coerción) la gente lo lee y lo lee como algo frío. Ha tenido una incidencia extraordinaria en lo que es la historia de la administración del Estado”, expresó el magistrado a los imputados previo a emitir su decisión.

Explicó que De los Santos Serrano al utilizar título de arquitecto previo a graduarse en la universidad, lo hizo para dar una connotación de que es una persona y en base a eso ganar influencia para hacer el trabajo que estaba haciendo; “usar al Estado para extorsionar”.

Refirió que el gran problema de los ingenieros beneficiarios de obras es que a ellos “les hacen la vida imposible y tienen que dar grandes porcentaje para que puedan pagarle una cubicación”.

El exencargado de edificaciones escolares, dijo al juez que mantenía comunicaciones prácticamente mensuales con el arquitecto Rodríguez y que una vez renunció de la OISOE este le pidió que le ayudara a conseguir una persona en el Ministerio de Educación que le ayudara a evitar que le descuenten totalmente una cubicación que le iban a entregar. “Él tenía unos compromisos en Educación entonces la cubicación que estaba esperando se la iba a absorber el Banco Reservas por unos compromisos que tenía allá. Qué pasa, luego de un mes de nosotros estar hablando por teléfono, yo le digo: óyeme, lamentablemente yo no te puedo ayudar”, refirió De los Santos. Señaló que en respuesta a lo que le había dicho David Rodríguez le escribió; “gracias Alejandro espero que no te remuerda la conciencia por mi desgracia”. 

Pimentel Kareh y otros interrogados

Mientras se conocía la medida, el Pepca interrogó ayer a otras dos personas por el caso. Laura Guerrero Pelletier, directora de la entidad ha reiterado, que las investigaciones son las que van a indicar quienes más deban ser citados e interrogados sin descartar al exdirector de la entidad, Miguel Pimentel Kareh, pero que eso se hará si la investigación así lo demanda y “no para satisfacer el morbo”. Los interrogatorios realizados a varias personas señalan que Alejandro Santos, recibía el dinero que prestaba a los constructores en apuro de manos de su jefe, José Florencio. Darío George Sarita dijo que le firmó una línea de crédito por unos seis millones y medio de pesos y autorización para que una comisión de la OISOE la cobrara tras abandonar la escuela que construía debido a la presión y propuesta hechas por De los Santos Serrano, Juan Reyes, Bienvenido Languazco, el Ing. Amparo y otra persona, la cual rechazó. El agrónomo Julio César Cáceres Ureña dijo que él acordaba hacer trabajos de jardinería con el exencargado de edificaciones y que un 60% de la ganancia era para él y el 40 para Alejandro así como los beneficios indirectos o gastos generales.

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