Un premio vainero

¿A quién se le puede ocurrir cuestionar los méritos literarios de Mario Vargas Llosa, laureado de todas las maneras, Premio Nobel de Literatura 2010? Desde el punto de vista de su obra, la concesión del Premio Internacional Pedro Henríquez Ureña 2016 para él probablemente equivalga a nada. Decenas de escritores latinos podrían merecerlo también, sin los desgarramientos que provoca el peruano nacionalizado español. El hombre que tildó la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional como “ una aberración jurídica…inspirada en las famosas leyes hitlerianas de los años treinta dictadas por los jueces alemanes nazis para privar de la nacionalidad alemana a los judíos…” Es echar una vaina a un sector de la sociedad dominicana.