Mercedes González Tirado a veces lloraba por la pérdida de su hermano mayor Fernando González Tirado, veterano cronista deportivo, quien falleció la tarde del pasado lunes en su residencia del ensanche La Fe.Pero a veces sonreía por las virtudes que, con el pasar de los años, lo engalanaron. “Fue una persona muy cariñosa. Me siento muy satisfecha de haber hecho la labor que me correspondía”, indicó Mercedes, mientras observaba con detenimiento el ataúd donde reposan los restos de González en la capilla F de la Funeraria Blandino de la Abraham Lincoln. El último adiós a “La Biblia”, mote con el que se le conocía gracias a su vasto conocimiento en materia de deporte, se efectuará a las cuatro de la tarde de hoy en el cementerio de la Máximo Gómez.
“Él me decía ‘ay mi hermanita, si no hubiese sido por ti hace rato que ya me hubiese muerto’. Tú fuiste el que me recogiste. Lo traté con amor, con cariño, con comprensión. Él se fue, pero se fue satisfecho porque me dijo, que siendo la más pequeña de 14 hermanos (tres fallecidos), era la persona que lo iba a tener hasta el último día de su muerte”, narra Mercedes. Una de las virtudes que adornaron a “Fernandito” era escribir de manera correcta los apellidos de los jugadores extranjeros que participaban en la pelota invernal con la finalidad de suministrárselos a las cadenas de transmisión, así como a los cronistas que laboraban en medios escritos.
“Fernandito fue una persona excepcional. Era como un padre para todos nosotros. Fue uno de los hombres más inteligentes que he conocido. Desde que me inicié en la crónica fue siempre un asesor nuestro”, dijo Leo Corporán, editor deportivo del periódico El Nacional.
De su lado, Carlos Nina Gómez, también resaltó las cualidades de González Tirado, quien ingresó a los medios de comunicación en 1940 en el programa “HIZ en los deportes”. “Fue una leyenda y uno de los pioneros de la crónica deportiva radial. Además fue un gran estadígrafo del béisbol”, dijo Gómez. Licey, Estrellas y la ACD también expresaron sus condolencias por el fallecimiento de González Tirado.
