Humberto no se considera propulsor

Humberto Rodríguez no cree que finalmente tendrá un nicho al lado de grandes deportistas de la República Dominicana.

Humberto Rodríguez no cree que finalmente tendrá un nicho al lado de grandes deportistas de la República Dominicana.Rodríguez es un amante del béisbol y está más que feliz por su exaltación al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano, entre otras, por estar junto a los hermanos Alou y Faisal Abel, quien le asistió cuando dirigió a la selección dominicana de baloncesto que ganó medalla de oro en el Centrobasket de Panamá en 1977.

Esa es la presea más connotada del baloncesto dominicano hoy en día, a pesar de que llegaron otras diez medallas después de ahí, incluidas dos doradas.
“Estoy muy orgulloso de estar al lado de gente que eran mis ídolos, no solo en baloncesto sino en béisbol”, dijo Rodríguez a elCaribe. “Imagínate, voy a estar al lado de los hermanos Alou. Yo me acuerdo que Felipe nos dio una charla de deporte llevado desde La Normal por Virgilio (Travieso Soto)”. El ceremonial 50 del pabellón será el próximo domingo 16 de octubre en el auditorio del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano del Centro Olímpico Juan Duarte.

Humberto, sin embargo, sugiere a los responsables de elegir que seleccionen a los entrenadores como entrenadores, y no como propulsores, como es su caso.
“Es muy difícil la selección, yo no me considero un propulsor del baloncesto, me considero un entrenador”, apuntó. “Creo que deben sacar un acápite, un capítulo para los entrenadores, porque es muy difícil que un entrenador pueda competir con un propulsor. ¿Cómo voy a competir como propulsor con Cristóbal Marte? Eso es imposible, Cristóbal es un propulsor. Hay que colocar al entrenador en su justa dimensión”, explicó.

De aquel equipo de 1977 solo no están en el templo de los inmortales Víctor Chacón y el extinto Héctor Báez, quien recibió palabras de elogio de Rodríguez. Sobre su paso como director técnico de la selección de República Dominicana, Humberto dijo que lo primero que hizo cuando le propusieron dirigirla fue pedir un ciclo. Aunque la medalla llegó en el año de 1977, él empezó a dirigir el conjunto nacional en 1973.

Él arrojó luz a ciertos temas sobre baloncesto. “Hugo (Cabrera) fue más importante que Chicho (Sibilio) para la selección, pero internacionalmente Chicho tuvo más suerte”. 

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