Violencia en Santiago deja 40 muertes

Santiago. Los hechos delictivos y de criminalidad han dejado 40 muertes violentas en Santiago en tan solo dos meses y 22 días de lo que va de año, una gran parte de casos sin resolver.

Santiago. Los hechos delictivos y de criminalidad han dejado 40 muertes violentas en Santiago en tan solo dos meses y 22 días de lo que va de año, una gran parte de casos sin resolver.Tan solo en el mes de marzo, suman ya 16 las víctimas mortales, de acuerdo a las estadísticas reveladas por el Departamento contra Violencia Física del Ministerio Público.

Los casos registrados no discriminan sectores residenciales de clase alta, ni barriadas, aunque el sector Cienfuegos y Don Pedro registran la mayor cantidad de muertes violentas.

En Cienfuegos, casi todos los casos ocurrieron por ajuste de cuentas entre bandas rivales que se disputan los puntos de ventas de drogas.

En tanto que en Don Pedro, la delincuencia común y jóvenes vinculados en atracos es el pan nuestro de cada día, lo que mantiene alarmados y atemorizados a la población.

Caso médico

Uno de los casos pendientes es el del médico Luis Manuel Sosa Cepeda, de 59 años de edad, encontrado degollado en el interior de su apartamento.

Aunque el hecho ocurrió el día once de este mes y fue apresado un hombre conocido por el galeno, hasta el momento, ni la Policía ni la Fiscalía ofrecen su nombre ni tampoco lo han sometido a la justicia.

Tan solo el año pasado se registraron aproximadamente 200 muertes violentas en la provincia de Santiago.

El día dos de marzo, en el sector Cerro Alto de Gurabo, un vigilante privado ultimó a un hombre de un cartuchazo cuando supuestamente penetraba a un vivero.

Hasta el momento, el individuo no ha sido identificado. Diez días después, desconocidos mataron a Camile Santeli de 40 años de edad, de nacionalidad haitiana, mientras prestaba servicio en Camp David en Gurabo.

Falta personal y ausencia de patrullaje

El cúmulo de casos y la falta de personal de parte del Ministerio Público dificultan la labor de dar respuesta a la mayoría de casos. Otra de las quejas de los ciudadanos es la falta de vigilancia y de iluminación en avenidas y calles, de la ciudad, lo que facilita la labor de los delincuentes. También el patrullaje mixto entre policías y militares ha disminuido considerablemente.

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