Tras la creación en el 1891 de la Asociación Médica de Santo Domingo, por el Dr. Manuel Durán Bracho, y otros distinguidos colegas, la sociedad pasó por momentos difíciles, como los vividos durante la ocupación militar norteamericana. No se podían reunir con libertad los pocos médicos del país, y desde luego, muchos médicos sufrieron represalias por su comportamiento cívico durante el gobierno militar. Pero tras la salida de las tropas invasoras, los médicos dominicanos decidieron hacer lo posible para agruparse, y a instancias de un distinguido grupo de galenos, se convocó a una asamblea el 12 de septiembre del 1926. Debemos tener presente que en esos momentos en todo el país ejercían cerca de un centenar de médicos. A continuación la transcripción de esa primera acta, denominada Acta de Instalación.
“Previa convocatoria del Comité de iniciativa de la Sociedad de Ciencias Médicas Dominicana, integrado por los doctores P. E. De Marchena, Fernando A. Defilló, Heriberto Valdéz, Luis E. Aybar y E. Rodríguez Oca se reunieron en la Sala Rafael María Baralt, de la Biblioteca Municipal de Santo Domingo el día 12 de septiembre de 1926, los profesionales médicos que se detallan en el acta notarial levantada por el Lic. Castro Ruiz y que aparece transcrita en el primer y segundo folio de este libro.
El profesor Dr. Marchena expuso en nombre de sus compañeros del aludido comité el objeto perseguido, al ser convocados los médicos residentes en el territorio nacional: la instalación de la Sociedad de Ciencias Médicas. Al terminar, el Dr. Marchena y en pie los profesionales asistentes, fue proclamada solemnemente la perseguida creación de la institución profesional a que se ha hecho referencia.
Después de un breve receso durante el cual se realizó un cambio de impresiones acerca de la elección de la mesa dirigente, se procedió a la celebración de las elecciones, previa proposición de nombres lanzada por el Dr. Valdez, con modificación del Dr. Mañón de que las designaciones fuesen hechas por aclamación por esta primera vez tan solo.
El resultado fue la integración de la junta directiva en la forma siguiente:
Presidente: Dr. Pedro E. De Marchena, 1.er vicepresidente: Dr. Luis E. Aybar, 2.º vicepresidente: Dr. Arturo Grullón, 3.er vicepresidente: Dr. Antonio Elmúdesi.
Tesorero: Dr. Emilio Rodríguez Oca, secretario de Actas: Lic. Viriato A. Fiallo, Sec. Correspondencia: Lic. Félix Raymond Vocales: Dr. Fernando Defilló, Dr. Rodolfo Coiscou, Dr. Heriberto Pieter.
El presidente Dr. De Marchena expresó su agradecimiento y el de sus futuros colaboradores en la función dirigente, por la distinción de que habían sido objeto y dio seguridades de su dedicación al trabajo.
Concedida la palabra al Dr. L. E. Aybar, se extendió en consideraciones oportunas e inteligentes invitando a sus compañeros a que hicieran una virtud del esfuerzo continuado.
El proyecto de reglamento fue leído por el Dr. Heriberto Valdez, disponiéndose su discusión para la próxima asamblea del 26 de septiembre.
A insinuación del Dr. Marchena se promovió un cambio general de impresiones acerca de la necesidad de crear el Sindicato Médico. El doctor Rafael Alardo, profesional bien documentado al respecto, recibió el encargo de redactar un proyecto de organización.
Para hacer insinuaciones, aclaraciones y expresión de opiniones turnaron en el uso de la palabra en el curso de esta sesión los doctores Coiscou, Pieter, Valdez, Marchena De Pool, Mañón, Raymond, Alardo y Cabral.
Se resolvió convocar una asamblea para el 26 del mes en curso, con el propósito de discutir los reglamentos. No habiendo más de que tratar, el presidente clausuró la sesión.
El presidente, Dr. P. E. de Marchena ; el secretario, Dr. Viriato A. Fiallo”.
