De la mano de un excepcional Dani Alves, la Juventus no tuvo consideraciones con el Mónaco al certificar ayer una victoria 2-1 que instaló al club italiano en su segunda final de la Liga de Campeones en los tres últimos años.En su primera temporada con la “Vecchia Signora”, Alves completó una actuación redonda en la semifinal. El lateral brasileño, marcó un gol y asistió en el otro. La Juve disputará su novena final europea el 3 de junio en Cardiff, ante el ganador de la otra semifinal entre Real Madrid y Atlético de Madrid. El conjunto italiano, que tiene dos títulos continentales, perdió la final de 2015 ante el Barcelona.
Alves, que llegó esta temporada a la Juve procedente del Barcelona, asistió a Mario Mandzukic en el primer tanto a los 33 minutos, y anotó el segundo justo antes del entretiempo con una extraordinaria volea desde afuera del área. Alves también asistió en los dos goles de Gonzalo Higuaín en el triunfo 2-0 en el partido de ida de la semana pasada.
Kylian Mbappé maquilló el marcador a los 69. La Juve avanzó con un 4-1 a su favor en el cómputo global de la eliminatoria. El equipo dirigido por Massimiliano Allegri busca emular la gesta del Inter de 2010, hasta ahora el único club italiano que ha logrado el triplete Serie A-Champions-Copa. La “Vecchia Signora” puede asegurar el título de la liga italiana el domingo, y también disputará la final de la Copa Italia ante la Lazio.
El campeón defensor Real Madrid tiene ventaja de 3-0 en la serie ante el Atlético que se definirá hoy en el estadio Vicente Calderón.
Obligado a revertir el marcador adverso, Mónaco se volcó al ataque de entrada. Juventus sobrevivió a un susto inicial cuando un remate de Mbappe, casi sin ángulo, se fue rozando el segundo palo, si bien la jugada había sido invalida por una posición adelantada del juvenil delantero. Instantes después, el atacante colombiano Radamel Falcao despidió un balón por encima del travesaño.
