Criminalidad azota comunidad Monte Adentro

Santiago. Jean Carlos Polanco, un estudiante de cuarto de bachillerato se convirtió en la nueva víctima de la criminalidad, al perder uno de sus ojos por los disparos ocasionados para despojarlo de su celular.

Santiago. Jean Carlos Polanco, un estudiante de cuarto de bachillerato se convirtió en la nueva víctima de la criminalidad, al perder uno de sus ojos por los disparos ocasionados para despojarlo de su celular.El hecho se produjo la noche del sábado cuando junto a un amigo caminaba por la comunidad Los Ramos del sector Monte Adentro, donde la delincuencia tiene de rodillas a sus moradores.

Polanco, de 21 años de edad, reside junto a sus padres en la comunidad La Vereda. Además de despojarlo de su teléfono móvil, los delincuentes robaron su cartera con 800 pesos, sus documentos personales y seguro médico.

El temor es tan grande, que su madre y el estudiante quien cursa el nivel secundario en la escuela Braulio Paulino de Tamboril, se niegan a ser fotografiados ante el peligro de que los delincuentes puedan tomar represalias.

“Ni siquiera pondremos querella. Como él no sabe quiénes fueron los que lo atracaron y como tienen su cédula, pueden venir a tomar represalias contra nosotros. Al menos mi hijo está vivo y no fue un muerto más de la criminalidad y delincuencia que azota a Monte Adentro”, expresa Martha de la Cruz, madre de Jean Carlos.

Víctimas

En la comunidad La Vereda, prácticamente todos los residentes han sido víctimas de la delincuencia.

Fanny Acosta, es otra de las afectadas por la ola de atracos. Recientemente fue despojada de la suma de 187 mil pesos por parte de los malhechores.

“Yo ni siquiera me mortifiqué poner la querella, porque la Policía no hace nada”, lamenta Acosta al hablar con reporteros de elCaribe.

Desde el año pasado a la fecha, en las comunidades Don Pedro y Monte Adentro suman aproximadamente treinta las muertes violentas, casi todas de atracos o presuntos delincuentes ultimados por agentes policiales, lo que ha motivado a la realización de marchas y vigilias. Una enfermera identificada como Cristina, fue asaltada en dos ocasiones.

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