“La venta de repuestos la inicié en una habitación”

Eddy García comenzó como ayudante de mecánica, luego fue vendedor de mercancías y hoy es un empresario. A Eddy García lo conoce “medio país” como el gran importador y vendedor de repuestos para automóviles americanos y japoneses, pero llegar hasta ahí no ha sido una tarea suave.

Eddy García comenzó como ayudante de mecánica, luego fue vendedor de mercancías y hoy es un empresario

A Eddy García lo conoce “medio país” como el gran importador y vendedor de repuestos para automóviles americanos y japoneses, pero llegar hasta ahí no ha sido una tarea suave. Eddy García no es uno de esos “ricos de cuna” que nació con la suerte en las manos, sino un fajador.

Ha sido vendedor de productos de belleza -que no eran suyos-, vendedor de partes eléctricas y empleado de un negocio de cristalería. Ha dado muchos pasos en la vida, hasta que en la habitación de una modesta casa que logró adquirir en un sector de Herrera comenzó a moverse en el mundo empresarial.

“Aprendí de mecánica en la comunidad San Víctor, en Moca. Para llegar al taller tenía que hacerlo en bola porque no tenía ni siquiera una bicicleta”, le cuenta Eddy García a elCaribe, en una conversación en las primeras horas de la mañana de un día de faena. Es campesino de origen y no se esfuerza por esconderlo. “Allá en Moca tuve luego un tallercito de reparación de automóviles, pero fui inducido a venir a la capital a trabajar en un taller en el sector Mejoramiento Social”, sigue contando García, en una oficina bien organizada, en la que hay retratos de su familia en varios ángulos. Se nota que tuvo buena crianza. Es un valor agregado para un hombre que diariamente tiene que lidiar con clientes de personalidades distintas.

Rememora que en el Mejoramiento Social no se sentía cómodo. “Luego me puse a revisar el periódico buscando empleo en la sección de anuncios. Solicité en Santo Domingo Motors, pero luego se presentó un puesto en otro lugar para vendedor de productos de belleza. Fue un cambio muy grande pero yo estaba joven y podía tomar la oportunidad. Eso fue en el año 1979”, indica.

La historia de Eddy, presidente de la empresa EddyGasa, tiene capítulos diversos y en cada uno de ellos ha estado presente el esfuerzo, la seriedad y el trabajo, según expresa. El negocio EddyGasa está en la calle Juan Erazo número 189, casi esquina 20 en Villa Juana, Distrito Nacional. No es un negocio que detalla piezas, sino que vende al mayoreo. La empresa, que inició con un capital de cinco o seis mil pesos (si se toma en cuenta el primer paso que dio Eddy en su casa) tiene actualmente 100 colaboradores. El establecimiento tiene 6,500 metros cuadrados de construcción. Eddy cuenta con una flota de vehículos para servicios de entrega de mercancías al 90% de sus clientes en todo el territorio nacional.

Eddy García tiene 66 años de edad, pero comenzó a trabajar a los 14. Tiene una hija y de su esposa Dulce habla con bastante interés. “Ha sido mi aliada y soporte”, asegura. Su padre fue agricultor y su madre ama de casa.

En los tiempos en que Eddy fue contratado como vendedor, lo ejercía viajando a la parte del Cibao. “Fueron tiempos en los que conseguí un carrito y para rendir el dinero lo que hacía era que en los viajes lo llenaba de pasajeros en la parada del kilómetro 9 de la capital. Para entonces la empresa me daba 35 pesos para cubrir gasolina, comida y hotel”, recuerda. Y agrega: “Después de agotar un tiempo vendiendo productos de belleza volví a trabajar como vendedor de repuestos automotrices aquí en Santo Domingo. Duré varios años ahí, luego duré dos más laborando para otra empresa de cristalería y posteriormente por insistencia de un amigo me independicé”.

Un trayecto en el que ha ido escalando peldaños

Formalmente fue en 1992 cuando se formó EddyGasa. Para ello, Eddy García contó con asesoría de Pedro Ureña. “Le agradezco mucho”, sostiene. El primer colaborador de Eddy García fue Valerio Salcedo, quien aún permanece laborando en la empresa. “Te digo a ti y le puedo decir a toda la gente, que la seriedad es la clave si se quiere progresar. Hay que trabajar con empeño y haciendo las cosas bien”, dice Eddy, como preámbulo para hacer una anécdota. “De mis ingresos como vendedor fue que pude comprar la modesta casa en el Residencial Santo Domingo, de Herrera. Y en una habitación de ella iniciar la venta de repuestos. Eso dice lo importante que es tener una clara visión”, plantea. “Un día –luego de conversar con mi esposa- vendí esa casa para invertir en el negocio, ya el negocio me seguía demandando recursos. Con la venta de la casa pude comprar piezas con las que llené dos contenedores, importados desde Taiwán”, expone el presidente de EddyGasa. Tiene siete hermanos con los cuales desarrolló un gran nivel de colaboración. La persona que le motivó a negociar fue Sergio Olivares.

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