El presidente Donald Trump reanudó ayer sus críticas a los jugadores de la liga de fútbol americano, la NFL, que se han hincado durante la ejecución del himno nacional.Los jugadores lo hacen en señal de protesta contra el racismo y la violencia policial, en particular contra la gente de raza negra.
Según Trump, el gesto es irrespetuoso y además perjudicial para el espectáculo. Trump tuiteó ayer que al menos 24 jugadores se arrodillaron durante los partidos del fin de semana y los estadios no lucen del todo llenos.
“El público estadounidense está harto de la falta de respeto de la NFL a nuestro país, nuestra bandera y nuestro himno nacional. ¡Débil y fuera de control!”, tuiteó el presidente. Trump dijo que la NFL es “débil” al no obligar a los jugadores a permanecer de pie durante la ejecución del himno. La semana pasada, el mandatario solicitó a la NFL suspender al running back Marshawn Lynch, de los Raiders, de sentarse durante el himno de Estados Unidos en México.