Puerto Plata. La falta de seguimiento al proceso de rescate del centro histórico de Santiago hace que presente un progresivo deterioro en áreas que ya fueron intervenidas.
Parte de las aceras adoquinadas y lámparas que fueron colocadas a un costo millonario, están destruidas. A una gran parte de las luminarias les faltan las bombillas y algunas de las que aún las tienen colocadas, no encienden.
Las lámparas fueron colocadas en las calles Del Sol, Beller, Restauración y el sector Los Pepines. La última intervención que se hizo a esta parte de la ciudad fue inaugurada en febrero del 2008 con una inversión de 250 millones de pesos.
Aunque se habló de que los trabajos de remozamiento, rehabilitación e iluminación del Centro Histórico conllevarían dos etapas, esto no se concluyó.
En esta ocasión el Ministerio de Obras Públicas contempla un plan de embellecimiento y pintura, pero solo abarcaría los edificios de la avenida Las Carreras y no los espacios céntricos que hace nueva años fueron intervenidos.
Dificultades
Otro de los problemas que enfrentan son los daños que presentan las aceras adoquinadas y que dejan al descubierto el desagüe pluvial en pleno casco urbano. “Necesitamos que alguien asuma la responsabilidad y resuelva esto y corrija los problemas de las aceras adoquinadas y así prevenimos que pueda alguna persona resultar afectada al caer en el desagüe”, expresa Pedro Pablo Domínguez al relatar la realidad.
En las redes sociales varias personas, entre ellos comunicadores, han mostrado su preocupación por el descuido en que se encuentra el centro histórico. Uno de ellos es el periodista Claudio Concepción, quien incluye una imagen del estado en que se encuentra una de las aceras adoquinadas en la calle Beller y el peligro que esta representa para los que se desplazan por la zona.
