En la construcción de una obra, a menudo pueden ocurrir situaciones como retraso en su culminación, vicios o que esa obra esté colocada en el lugar menos indicado. Es ahí donde la figura del interventor reviste de gran importancia.

En República Dominicana, el término es prácticamente nuevo, pero en otras naciones funciona desde hace muchos años, y aplica tanto para obras de tipo eléctrico, como para la construcción de hospitales, escuelas, carreteras, puentes y otros.
Es una figura muy común en cualquier proyecto en otras naciones.

La figura del interventor o de auditoría técnica, como le denominan algunas personas, lo que hace de manera concreta es velar porque los proyectos se hagan en tiempo y forma y de la manera como fueron pactados. A República Dominicana, el interventor llegó a propósito de que los organismos multilaterales de financiación tenían mucho tiempo invirtiendo para el sector eléctrico y no veían los resultados esperados, según explica el consultor Federico Valera, socio-director ejecutivo de Atrato Energy Consulting. “En el año 2015, como parte de los financiamientos, esos organismos licitaron para que entrara la figura del interventor. Fue ahí como entramos, en alianza con una empresa internacional y hemos ido acumulando experiencia local en ese tema a nivel local”, indica Valera.

Para ser más específico, toma como ejemplo la asesoría que ofrece su firma en obras que se levantan en la parte de distribución de electricidad (en redes eléctricas). “En este caso, ni somos el que recibe las obras, porque eso lo hace la empresa distribuidora; ni somos el contratista que construye, ni el accionista, que es la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales; ni somos el financiador, que en este caso son las multilaterales. Somos una figura independiente que se encarga de que las obras queden lo mejor posible”, dice el consultor Valera, al abordarlo elCaribe.

Asegura que el interventor garantiza que la duración y la calidad de una obra sean mucho mayores, porque se trata de alguien que no es parte del conglomerado, sino de alguien que está dedicado exclusivamente a que se construya con la calidad adecuada. “Las inversiones en distribución eléctrica en el país son muy grandes, y en el pasado ocurrió que cuando se hicieron las inversiones faltó supervisión, seguimiento, y que las normas entre empresas distribuidoras fueran homogéneas”, sostiene.

El interventor aplica también para el nivel privado, es decir, para obras en las que no hay inversión pública, sino de particulares o de empresas. En este caso, suele ser algo así como el asesor del dueño. Aquí, como cuando se trata de una obra estatal, el interventor no es ni el constructor ni el asesor, sino alguien a quien el propietario de la obra contrata aparte para que vea todo desde otro ángulo que no ven los dos anteriores. Federico Valera asegura que el Gobierno no ha entrado mucho en buscar interventores, pero cabe la posibilidad de que en el futuro lo haga, dado los beneficios que genera.

¿Y buscarlo no encarece el costo de la obra? Pregunta este periódico. Su respuesta es esta: “El costo de la interventoría es mucho más bajo que cuando se pierde una obra completa, o que cuando ésta no cumple con los estándares y al final tiene fallas de diversa índole”. El interventor está en capacidad de indicar si un diseño funciona o no para un sitio equis, si los materiales que se usarán y componentes son los adecuados y para opinar sobre la precalificación de la supervisión y los contratistas de una construcción y el seguimiento de la entrega y la garantía de la obra.

Certificaciones técnicas le sirven de aval al operar

“Cuando se construye un puente, tú tienes a un supervisor que ha estado ahí, dando seguimiento a eso, pero de repente resulta que el puente se cae. El interventor entra en esa parte, porque el interventor entra en métodos científicos mucho más exhaustivos”, asegura el ejecutivo de Atrato Energy. Básicamente, el tipo de certificación que tiene un interventor, dependiendo del área de acción, son certificaciones técnicas. Por ejemplo, si audita trabajos de la parte eléctrica, debe tener el aval en ese renglón y así para otras ramas.

Profesionales de diversas disciplinas lo acompañan

El socio-director ejecutivo de Atrato Energy Consulting, asegura que esta es la primera firma de consultoría dominicana. Dice que es interesante incluir la parte del interventor en el modelo de inversión. La empresa tiene un equipo de profesionales multidisciplinario, entre ellos ingenieros eléctricos y civiles, abogados y economistas. “Nos enfocamos en lo que tiene que ver con eficiencia energética, las auditorías técnicas a las obras de red, el diseño de las obras y ese tipo de cosas. Su sitio o página web es atratoenergy.com

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