Cada país posee en su gastronomía platos que lo representan. Por ejemplo, la cocina de Montevideo, Uruguay, se caracteriza y enamora a los comensales con sus variados platillos. Ésta es bastante variada y aprovecha todos los recursos a su alcance, desde carne, productos lácteos, hasta postres con dulce de leche y frutas de la región. También produce sus propios vinos, destacando nombres como Tanat, Don Pascual, entre otros. La cepa tannat (tipo de uva) cultivada en el país y originaria de Francia, ha llevado a Uruguay a convertirse en el mayor productor del mundo de esa variedad. Sin embargo, al hablar sobre el plato predilecto de esta nación, sin dudas, las carnes a la parrillada lo es. Según la página del Ministerio de Turismo de Uruguay, la parrilla es, por excelencia, uno de los más destacados menús de la dieta uruguaya. Se compone de diferentes tipos de carnes asadas a la parrilla. El secreto que guarda este antiquísimo método de cocinar, es que hace posible la concentración de los jugos que poseen los alimentos y que conserven así sus propios sabores característicos. Los vinos uruguayos son la combinación perfecta para acompañar estas carnes.
Otro de los platos que se degustan en Uruguay es el “chivito”, un sándwich relleno con rodajas muy finas de lomo vacuno, verduras, queso, aceitunas, rodajas de huevo duro y aderezos como mayonesa o cachú. Acompañado de papas fritas, ensalada rusa u otras guarniciones.
